20 Diciembre 2010
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Cierre legislativo Recordará usted amable lector, que hemos estado comentando la cachaza del sátrapa de Jalisco, Emilio González Márquez, de negarse a pagar a la Universidad de Guadalajara una asignación previamente aprobada por 702 mdp. Ahora el susodicho dice que entregará únicamente 245 mdp y que ya no hay dinero. La cifra citada no alcanzará para liquidar las obligaciones de diciembre. Estamos hablando de partidas etiquetadas de antemano. Saque usted sus conclusiones. En algo que no tiene nombre, el asunto de la desaparición de un dictamen en la Mesa Directiva del Senado, marca un hecho histórico, de los muchos que a diario se presentan en nuestro país. Así como lo lee usted amable lector, se perdió el expediente relativo a una iniciativa para que el Distrito Federal pudiera tener partidos locales. El PAN y el PRD estaban en contra de la propuesta por lo que optaron por ¿robarse? el expediente, como una muestra más de la democracia imperante en este sexenio de la pesadilla. De acuerdo con la estructura del PIB, por sector institucional, las empresas generaron en 2009 el 54% del PIB, aunque disminuyó con respecto a 2008, en un 2.8%. En este aspecto recordará usted amable lector que en días pasados le comenté que anualmente el sector económico más poderoso del país, no liquida y por tanto no entera algo así como 600 mmdp, denominados "gastos fiscales" y que no son más que elusiones y evasiones fiscales. ¿Qué opina usted? Después de un sinnúmero de debates, en los que las discusiones se llevaron horas y horas, en los que afloraron los intereses de los partidos, sus gerifaltes, sus grupos de poder, "los senadores acordaron que no había acuerdo" y así la terna que Calderón envió a esa Cámara para designar la undécima magistrada de la SCJN, quedó en el limbo. En el mismo sentido, la designación de los consejeros del IFE, en San Lázaro, se pospuso para mejor ocasión, es decir, para el próximo período ordinario que se llevará a cabo a partir de febrero de 2011. La irresponsabilidad brota por todos los poros de los legisladores del Senado y de la Cámara de Diputados. El cierre del período de sesiones ordinarias estuvo marcado, como en muchos de los pasajes sucedidos en el curso del mismo, por el desaseo, las irregularidades, la informalidad, la impuntualidad, la falta de interés en el quehacer legislativo, así como la conducción errática, tanto en el Pleno, como en Comisiones. La cereza del pastel la constituyó la discusión sobre el Reglamento de la Cámara de Diputados, que se supone habrá de sustituir el que hasta la fecha opera y que tiene una antigüedad de 76 años, es decir, desde 1934. El proceso tomó varios meses, pero en las últimas semanas a los partidos grandes, léase PRI, les entró la prisa y esto dio pie a una inacabable, tediosa y estéril discusión que obligará al final, a que sea el próximo año cuando tengamos humo blanco, para aplicarse en enero de 2011. En lo general y en lo particular fue aprobado del proyecto de reglamento y las reservas se van para después. Para el anecdotario, algunos diputados de esta LXI Legislatura tuvieron ¿a bien? aportar al diccionario de frases parlamentarias las siguientes: Frases memorables y figuras jurídicas, que quién sabe qué quieren decir: “Votación transversal”; poco “córum” (nuevas reglas de la RAE); las “galeras”, por las galerías; “córum ponderado”; “me adhiero” (cuando algún diputado coincide con la propuesta de un diputado que lo precedió en la tribuna); “córum progresivo”; “observaciones”, en lugar de reservas; sin olvidar la remasterización de la parálisis del reloj parlamentario y la no menos importante, “para explicar a la Asamblea y a mí mismo”. Para la historia. carlos@carlosabines.com.mx
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