Habemus presupuesto
Carlos Manuel Sabines
Ciudad de México.- El pleno de la Cámara de Diputados aprobó, en lo general, el PEF 2014. El total del gasto es de 4 billones 457 mil millones 225 mil 800 pesos. Su similar de 2013, fue de 3 billones 931 mil millones 289 mil 500 pesos; es decir, representa un incremento de 525 mil 936 millones 300 mil pesos o el 13.37 por ciento, que en las circunstancias actuales, equivale a un aumento inercial que no resolverá los ingentes problemas de la problemática nacional.
El documento debiera ser base para reorientar el gasto público y así provocar que el modelo económico en vigor sea sometido a un golpe de timón que permita salir de las amarras del capitalismo salvaje que nos atosiga. El modelo neoliberal que nos ha impuesto el Consenso de Washington, está visto, no da para más, pues sus limitantes lo único que crean es más pobreza y menos empleos, más desempleo, más inflación, menos crecimiento económico, más deuda, menos patrimonio, menos inversión en el campo, menos reconversión industrial, menos austeridad y más gasto corriente en sueldos y privilegios a una burocracia cada vez más demandante. Hay menos capacidad de inversión en bienes de capital y consecuentemente, más dispendio en gasto superfluo.
La soberanía alimentaria y la autonomía energética, el buen uso del petróleo y energía eléctrica, es decir, la justicia social, son y seguirán siendo utopías del pueblo mexicano. Todos esos “atributos” nos hacen más dependientes del exterior y con ello hay menos posibilidades de que el pueblo mexicano arribe a mejores estadios de bienestar.
En apretada síntesis, de lo anterior se desprende que se dejaron al garete temas tan importantes como son los apoyos a la agroindustria azucarera; al Programa Especial Concurrente; para un país cuya vocación es el campo, solo se dedicaron fondos adicionales por 38 mil millone de pesos respecto a lo asignado en 2013; se negaron devoluciones de los ahorros de los ex braceros que trabajaron en los EU de 1942-1964, cuyos montos serán cada vez más impagables; un gobierno inculto, negó recursos indispensables para este sector, al tiempo que la asignación a la ciencia, tecnología e innovación se le regatearon apoyos, al igual que a todos los niveles de educación; la inseguridad y sus consecuencias, a pesar de los millonarios recursos asignados, son tareas pendientes de resolver, que en algunas entidades llevan a la ingobernabilidad, por falta de oficio político.
La manera en que la aplanadora del partido en el poder pasaba por encima de los partidos emergentes, funcionaba a partir de que les permitían el derecho de pataleo, que consistía en que las discusiones y debates de los temas se llevaba hasta unos cuantos días antes de que fenecieran los plazos reglamentarios, de tal forma que se dieran discusiones en tribuna; así se operaba en legislaturas anteriores. Sin embargo, desde que el PRI se apoderó del poder, creando un nuevo PRI peor que el viejo, las formas cambiaron; ahora el PRI, PAN, Chuchos, verdes, panalistas, estiraron la liga hasta el máximo, para que las aprobaciones en comisiones y en el Pleno, fueran logradas por cansancio.
Ese escenario se ha repetido en este año y hay que hacerse a la idea de que será el método bajo el cual la privatización energética nos será impuesta.
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