PEREZ17102022

ALGO QUE NOS PASÓ Y NOS CONTARON
La muerte de Reynaldo Cantú Tijerina, 2
David González Cantú

Monterrey.- Ayer se presentó ante el juez el homicida Emilio Cavazos. Serenamente, sin demostrar el menor asomo de temor y acompañado tan sólo por Manuel de la Garza Vega, su tradicional defensor y uno o dos de sus íntimos amigos, se presentó ayer en la mañana, en punto de las 10 A.M. ante el juez de Letras, el homicida Emilio Cavazos. En sus bolsillos portaba el Amparo que le fuera concedido por las autoridades federales de Nuevo Laredo. Contra todo lo que se esperaba, no asistieron a la diligencia judicial ninguno de los hermanos de Reynaldo Cantú, su víctima.

Cavazos Garza en el preámbulo de sus declaraciones manifestó que había obrado en legítima defensa; repeliendo la agresión del hoy occiso y obligado por las circunstancias.

Los hechos
Es la siguiente, sintéticamente, la forma en que, según Emilio Cavazos se desarrollaron los sangrientos sucesos: La noche de los hechos, principió por decir el acusado, me llegué a la cantina propiedad del Güero Ernesto, en busca de Roberto Tamez, que me debía algún dinero y del cual me encontraba muy urgido para surtir mi cantina. Creo haber arribado a ese lugar pocos minutos antes de las 23:30 horas.

En una de las mesas cercanas a la barra de ese establecimiento, sin acompañantes libaba Reynaldo Cantú, con quien conservaba yo relativa amistad. Le salude, así como al Güero; y me disponía a retirarme, pues no encontré a Tamez ( sólo se encontraba en el lugar, recalcó el homicida, el dueño de la cantina y Reynaldo), cuando el hoy occiso me invito a su mesa a beber en su compañía.

Todo iba bien hasta ahí; tomamos una o dos copas y de repente, Reynaldo recordó el incidente que ocurrió en Villa de Guadalupe (hacía un año y meses aproximadamente) y motivo por el cual se le encerró en la Cárcel Pública de aquella población. Yo me encontraba casualmente en el lugar, pero no pude intervenir ante el presidente Municipal porque le había molestado con anterioridad y sabía que no accedería a mis deseos.

Desde ese entonces, agregó Cavazos, Reynaldo guardó rivalidad conmigo, una rivalidad que no me demostró abiertamente, pero que pregonó a todos los vientos. Expliqué a Cantú que no deseaba pelear, que me encontraba todavía bajo proceso y que cualesquier lío me traería serias dificultades. Traté de evitar la riña, pero Reynaldo continuó insultándome. Creía en un principio que las cosas no pasarían a más y que las palabras de Reynaldo, a quien consideraba amigo, eran simples reproches de amistad, pero no fue así. Inesperadamente, Cantú saltó de su silla, desenfundó su pistola y me disparó una o dos ocasiones, al tiempo que intentaba parapetarse tras la hoja de una de las puertas. Yo desenfundé también mi pistola, y sabiendo con quién me las había, conociendo su pericia en el manejo de las armas de fuego, no esperé más y contesté la agresión, vaciándole íntegra la carga de mi automática (nueve cartuchos). No seguro de haberle dado muerte, volví a cargar la pistola y lo más rápido que pude salí de la cantina, abordé mi automóvil estacionado sobre la calle Reforma y huí… Estuve oculto algunos días en poblaciones cercanas, pero comprendiendo que tarde o temprano caería en poder de la Justicia, opté por ampárame primero en Nuevo Laredo y comparecer ahora ente las autoridades de Nuevo León.

Alegatos judiciales en proceso de Emilio Cavazos
La Agencia del Ministerio Público dice que es improcedente que el Juez de Distrito le conceda amparo, porque ya se concedió en Nuevo Laredo.

Contra la resolución del Juez de Distrito en el proceso de Emilio Cavazos, por la muerte de Reynaldo Cantú, la Agencia del Ministerio Público interpuso recurso de apelación. El Juez concedió a Emilio la suspensión definitiva en su juicio de amparo promovido contra la orden formal de prisión dictada por el juez primero de Letras del Ramo Penal.

Alega el Agente de Ministerio Público que el acusado se haya disfrutando de la suspensión definitiva que le concedió el Juez de distrito de Nuevo Laredo, por lo cual resulta improcedente que este Juez también se la conceda. Expresa el Agente que tratándose de un delito grave, como el que se imputa a Cavazos, por este aspecto también debió negársele la suspensión, considerando que no cabe la libertad bajo fianza en esta clase de delitos.

En virtud de dicho recurso, los autos habrán de remitirse a más tardar en el curso de la siguiente semana al Tribunal Colegiado del Tercer Circuito. Al cual toca determinar si fue procedente o no la resolución dictada por el juez.

Mientras tanto, Cavazos sigue disfrutando de la libertad concedida y hace dos días se presentó en el juzgado a depositar la garantía de la fianza de 30,000, exigida para que surta efecto la suspensión definitiva concedida contra el auto de formal prisión que había sido dictado en su contra.

El caso penal de Emilio Cavazos pasó a la Corte
El proceso contra Emilio Cavazos pasó a la Suprema Corte, según informó ayer su abogado defensor. Cavazos, acusado por el delito de homicidio, obtuvo la suspensión contra la orden de aprehensión librada en su contra en Nuevo Laredo. Posteriormente volvió a promover amparo contra el auto de formal prisión, dictado por el juez Penal que conoce de la causa; esta vez el amparo se promovió en Monterrey y el juez de distrito le concedió la suspensión definitiva del acto reclamado, mediante una fianza que fijó en 30,000 pesos.

Pero el Agente del Ministerio Público no estuvo conforme con la resolución del Juez, e interpuso recurso de revisión, por lo cual los autos debieron remitirse al Tribunal Colegiado del Tercer Distrito.

Ayer nos comunicó el licenciado que se le había notificado que el asunto pasaba a la Corte Suprema.


[Mañana continuará…]