AUTORES DE NUEVO LEÓN
Entrevista con Juan Manuel Zermeño Posadas
Eligio Coronado

Monterrey.- Juan Manuel Zermeño Posadas (Monterrey, 1991) es escritor, crítico, artista conceptual y editor.

     *Pertenece y modera el Grupo de Investigación Trans-estética Nudos.

     *Dirige la revista y próxima editorial Kátharsis XXI.

     *Es cofundador del proyecto Slam-Poetry Monterrey.

     *Formó parte del Comité Organizador del X Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes.

     *Formó parte del Consejo Editorial de EnterMagazine y Revista Órfico.

     *En 2013 obtuvo el primero y segundo lugar, más una mención honorífica, en el Certamen de Literatura Joven Universitaria de la UANL.

     *Ha publicado artículos de opinión y crítica en el suplemento Laberinto de Milenio Diario Nacional, y recientemente en Altavoz, Bayonetta Mx y La Zona Sucia.

     *Su obra poética aparece en diversas revistas nacionales e internacionales, así como en los libros: «Poetas Parricidas -Generación de entre siglos-» (Cuadrivio, 2014), «Los volátiles» (Juanita Cartonera de Chile, 2014), «Espasmo. Muestra de poetas de Monterrey nacidos entre 1986-1997» (UANL, 2016), «La vida en sí. Life itself. Poesía de lo cotidiano en el norte de México» (UABC/ Colorado Press, 2016), «Zaragoza arde la TV. Literatura Joven Universitaria» (UANL, 2016) y «Parkour pop.ético» (SEP, 2017) así como en el CD «Antología de Spoken Word regiomontano» (Slam Poetry Monterrey, 2013).

     *Ha sido traducido al inglés, alemán e italiano.

     *Actualmente es becario del Centro de Escritores de Nuevo León.


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1- ¿Cómo escribes?
R= Con música, por lo regular. Lo sonoro suele despertar en mí un río de imágenes que explotan en jauría de mariposas ensangrentadas hacia la hoja en blanco. Eso para la poesía. Para el ensayo con un montón de libros y artículos en internet abiertos al mismo tiempo: consultando y revisando referencias. Soy muy celoso y distraído, así que suelo hacerlo en lugares silenciosos de la ciudad donde pueda concentrarme o en la intimidad de mi habitación con escasa luz del día.

2- ¿Por qué escribes?
R= Es mi naturaleza. La escritura siempre me ha acompañado y es donde me siento más cómodo para expresar y liberar mis manías. El lenguaje me permite fluir y entenderme a mí mismo. La escritura crece conmigo como si fuera una extensión de mi cuerpo, un sexto sentido. Es el arte que me permite desnudar y disfrazar a mi entero antojo.

3- ¿Desde cuándo escribes?
R= Ya esbozaba versos desde la secundaria, era un chico muy inseguro y enamoradizo. Fue en la preparatoria en donde comencé a llenar libretas y libretas con lo que yo creía eran canciones de rap. Creo que alrededor de los 18 años me di cuenta que era lo mío y que debía profesionalizarme e intentar ser siempre de los mejores, o por lo menos de los más preparados y honestos.

4- ¿Para quién escribes?
R= Para las, los y les que buscan algo más, que se aburren de lo simple y aburrido de siempre, de la vida típica sin sazón. Escribo para expandir imaginarios, provocar goces de experiencia estética, para ejercitar el pensamiento. Escribo para quienes entregan su alma a Dionisio y Apolo al mismo tiempo; que entienden que hasta los juegos tienen reglas para poder divertirse. Escribo para quienes gusten conocerme y deleitarse con mis pasiones.

5- ¿Sobre qué escribes?
R= Sobre la alteridad, lo Otro. Me gusta experimentar e investigar sobre diversos temas; los ejes principales que me interesan son el origen de comportamientos de la psique humana, la violencia en sus límites, la constitución y fallas de la realidad o lo que es real, sobre la evolución del arte, la mentalidad de asesinos seriales, las complicaciones del mentir en las interacciones sociales, los estereotipos de género, lo complicado de tejer relaciones saludables, la oscuridad humana manifiesta en las atrocidades de la historia. Y en todas esas cosas siempre estoy hablando de mí y desde mí.

6- ¿Qué es para ti la literatura?
R= Mi salvación. Sin libros ni clases de literatura mi mente hubiera colapsado hace mucho; sin ella quizá ni siquiera tuviera sentido seguir respirando. Son ventanas que hidratan de frescura e hinchan de oxígeno estos pulmones con harta hambre de vivir y escribir cosas nuevas. La posibilidad de la invención, todo libro es un manual de magia, grimorio que siembra dinamita en los puentes de la imaginación para obligarla a volar. Respeto tanto la literatura, por eso, al hacer crítica trato de quitarle los excedentes para hacerla lucir con brillo propio.

7- ¿Qué opinas de tu propia obra?
R= Que está y estará siempre en proceso. Que mi escritura es el cuerpo que flota en el manantial platinado de mi inconsciente, lo apenas legible, visible y palpable. Que se modificará e irá tomando las vertientes que dicte el momento y mis obsesiones personales. Mudo de géneros literarios con la misma frecuencia que mudo de labios y me encantaría pensar que seguiré haciéndolo.

8- ¿Cuándo está listo un texto?
R= Cuando ya no me pide nada. Es difícil, pero el mismo texto te pide que le quites la mano de encima, que lo dejes de intervenir y que lo saques del horno. Que está listo. Cada texto debe defenderse por sí solo, enfrentarse al mundo sin ti.

9- ¿Qué opinas del nivel de nuestra literatura nuevoleonesa?
R= Que debe mantenerse, debemos mantenerlo. En narrativa y poesía tenemos un alto nivel en las generaciones nacidas en los 60 y 70. Nos toca continuar el legado y retomar la historia literaria de acá. En los últimos años las editoriales emergentes han dado un punch muy importante, apoyando y motivando la creación local. Destaco los catálogos de Analfabeta, Tresnubes y Atrasalante, así como la Editorial Universitaria en la formación de corpus de autoras y autores. Sin embargo, la falta de crítica literaria ha desembocado en que algunos libros se publiquen sin tallereo o filtros serios por la prisa, abonando algo de paja a la gran producción regia. Creo que las nuevas generaciones, o la mía, aún no ha dado el punch al nivel de la calidad que tenemos: parto de que poseemos el privilegio de tener grandes formadoras y formadores, así como los canales de publicación; quizá nos conformamos con el ámbito local, o por lo menos, veo esa preocupación única de ser legitimados solamente en el rancho por las escrituras más jóvenes que tienen ahorita entre 20 y 30 años.

10- ¿Vives de la literatura?
R= Aún no, aún no. La ingeniería me da para sobrevivir, pero el costo de tiempo es demasiado caro, la vida se me va y apenas estoy por dar el brinco a lo que me apasiona.

11- ¿Para qué le sirven los escritores a la sociedad?
R= Son lo intermedio entre lo profundo y lo cotidiano. Esa voz inteligente que sabe expresar con claridad las ideas. La representan, definitivamente. Somos un síntoma de la misma. El reflejo de las problemáticas contemporáneas y actuales. Le servimos como un espejo, como un registro de barbarie.

12- ¿Quiénes escriben mejor: los hombres o las mujeres?
R= Escribe mejor quien trabaja y se disciplina por escribir mejor. Eso y un toque nato de talento, pero eso es azaroso. La escritura no conoce de sexo ni género de la mano que la empuña: aunque debo reconocer que la visibilización reciente de autoras hispanoamericanas nos ha abiertos los ojos a un mundo oculto de altísima calidad que la historia literaria había dejado al lado.

13- ¿El gobierno o Conarte te han apoyado alguna vez?
R= Cuando era joven solía ser invitado mucho a eventos. Después, quizá por funcionarios o gestores muy políticos y envidiosos, no fui tomado en cuenta. Hasta 2019 junto a mis mejores amigos y colegas ganamos la convocatoria y organizamos el X Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes. A inicios de este 2021, participé por primera vez en el Centro de Escritores de Nuevo León, -exhortado y motivado por mi mejor amigo y roomie, Míkel F. Deltoya- y quedé seleccionado. Me gusta pensar que en lugar de apoyarme han reconocido lo que me he ganado con base a los resultados, evaluado por personas que saben y no improvisan, que otorgan sin favoritismos o dedazo: creo que cuando hay libertad para los jurados me va mejor. Nadie me ha dado nada por bonito ni he pedido nada apresuradamente, elegí el camino difícil y lo sé: crecer por trabajo propio, a lento paso pero seguro sin oportunismos, nepotismos o política deshonesta. Por eso camino con la frente en alto y dando la cara siempre, no me avergüenza nada de lo que he hecho y siento orgullo de todas las cosas que llevan mi nombre, tanto en escritura como en gestión cultural. Ojalá las personas favoritas, que ya están como mosca hasta en la sopa de las instituciones, den la talla con la calidad que lo hacemos los que sí picamos piedra con la marea en contra.

14- ¿Autores favoritos?
R= Esta pregunta podría ser toda una entrevista o un libro, me limitaré a lo que se me venga a la mente en estos segundos: Fernando Pessoa, Anne Carson, Elena Garro, Banana Yoshimoto, Antonio Gamoneda, Milan Kundera, Clarice Lispector, Roberto Bolaño, Fernanda Melchor, T.S. Eliot, Lucia Berlin, Jack Kerouac, Roberto Piva, Verónica Gerber Bicecci, Pedro Juan Gutiérrez, Raúl Zurita, Marossa Di Giorgio, por mencionar lo que tenía en la punta de la lengua.

15- ¿Libros que te hayan impactado?
R= Recientemente leí «Bluets», de Maggie Nelson, y me dejó perplejo, me impactó demasiado y creo deberíamos estarlo leyendo todes ya. Buenísimo. Por supuesto: «La vida está en otra parte», de Milan Kundera, es un libro que existencialmente me acompañó en mi trayecto con la escritura poética, muy revelador. También «El libro del desasosiego», de Pessoa, me movió demasiadas cosas, fragmentos melancólicos que entraron en sintonía conmigo. «Las travesuras de la niña mala», de Vargas Llosa, y «La loca de la casa», de Rosa Montero, fueron libros que me atraparon y leí de manera enfermiza con rapidez. El dinamismo y la simbología de toda la saga de libros de Dan Brown me impactó por su complejidad de thriller. «El matrimonio del cielo y el infierno», de William Blake, me mostró otra posibilidad de ética y re-interpretación de muchas cosas. Y podría seguir y seguir; hay literatura impresionante para rato y mucha aún ni la he descubierto.

16- ¿Cómo generarías lectores?
R= Acercándoles buena literatura, no mi obra ni la de mis amigos, sino las grandes ligas de las grandes ligas. Dejando que sus propias subjetividades forjen un gusto propio y se vuelvan exigentes, lectores activos y críticos: cuando más afinas tus gustos y capacidad de análisis literario mayor es el disfrute, un semi orgasmo emocional y racional. Un postre al intelecto estético.

17- ¿Qué recomendarías a las personas que desean ser escritoras?
R= Que se lo tomen en serio como cualquier juego. Que sepan que es algo que es para toda la vida, una vocación, si no la tienes, solamente eres aficionado. Que escriban muchísimo, que solo el 5% de todo lo escrito por sus manos valdrá la pena, que nunca tengan prisa: ese es el peor cáncer de la literatura. Que lean, que lean y nunca dejen de actualizarse ni de aprender. Se necesita leer como desquiciado para escribir bien y encontrar un estilo propio y un qué decir, ése es el truco: que se pregunten y respondan con frecuencia la pregunta dos de esta entrevista.

18- ¿Proyectos futuros?
R= Terminar este libro de poemas que actualmente estoy trabajando en el Centro de Escritores. Entregar a la editorial otro libro de poesía, que llevo retrasado, de nombre "Euphoria", que se ha reestructurado varias veces; necesito encontrar la última versión con la que esté a gusto, y a finales de año revelaré también otro libro que me está costando sangre de investigación, pero es de lo que me especializo y posiblemente será un hit grande de poesía que vea luz el próximo año: de ese tamaño tengo la responsabilidad de hacerlo bien. También estaré volviendo al periodismo cultural y crítica de arte tanto en escritura como en otros medios como Youtube y Podcast. También tengo un par de proyectos de escultura e instalación como artista conceptual, pero eso se irá dando poco a poco para cierre del año y principios del siguiente. Tengo la agenda llena y muy apretada, pero es mi momento y tengo que darle fuego.