GOMEZ12102020

El pueblo pone y el pueblo quita
Lupita Rodríguez Martínez

Monterrey.- Tras una larga lucha del Partido del Trabajo por más de 30 años, al fin quedará estipulado en la Constitución Política del Estado de Nuevo León que el pueblo tiene el derecho de solicitar la revocación de mandato del Gobernador o Gobernadora a partir de la pérdida de confianza.

Nos congratula que la actual Legislatura haya aprobado la reforma constitucional en materia de revocación de mandato y de consulta popular, con base en la reforma constitucional federal promulgada el 20 de diciembre del 2019 por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Con esta reforma se garantiza a la ciudadanía nuevoleonesa el derecho de solicitar y de participar en los procesos para determinar la conclusión anticipada de la persona titular del Poder Ejecutivo del Estado, así como en las consultas populares sobre temas de trascendencia estatal o municipal.

Así, la revocación de mandato se podrá solicitar con los mismos requisitos establecidos para el Presidente de la República; es decir, en una sola ocasión durante el sexenio y en el transcurso de los tres meses posteriores a la conclusión del periodo constitucional del Gobernador.

Para llevar a cabo este instrumento de participación, la ciudadanía lo deberá solicitar ante la Comisión Estatal Electoral (CEE) con la firma de al menos el 10-diez por ciento de la lista nominal de electores, siempre y cuando la solicitud corresponda a por lo menos la mitad más uno de los municipios.

Una vez verificado el cumplimiento de los requisitos, la CEE emitirá inmediatamente la convocatoria al proceso de revocación.

La jornada de participación se realizará mediante el voto libre, directo y secreto el domingo siguiente a los noventa días posteriores de la convocatoria y en fecha no electoral.

Para que el proceso de revocación sea válido deberá haber una votación de por lo menos el 40-cuarenta por ciento de la ciudadanía, ya que sólo procederá por mayoría absoluta. Para ello, la CEE tendrá a su cargo la organización, el desarrollo, el cómputo de la votación y la emisión de los resultados del proceso, los cuales podrán ser impugnados ante el Tribunal Electoral del Estado (TEE).

Una vez que el TEE resuelva las impugnaciones interpuestas y en caso proceder la revocación, la CEE emitirá la declaratoria y el Presidente del Congreso asumirá provisionalmente el cargo de Gobernador, siendo el propio Congreso quien elija al Gobernador Sustituto por voto secreto y absoluto.

Ciertamente el principio de legalidad constitucional impide que esta reforma se aplique de manera retroactiva, por lo cual la revocación del mandato popular será para los sucesores de nuestro actual Mandatario.

En la pasada Legislatura el Partido del Trabajo propuso contemplar no sólo la revocación de mandato del Gobernador, sino también de diputados, alcaldes, regidores y síndicos. Aunque se nos dijo que esta propuesta iba más allá de la reforma constitucional federal, la Ley de Participación Ciudadana vigente desde 2016 ya contempla que la ciudadanía solicite revocarles el mandato. Aún más, la Ley de Gobierno Municipal dispone que la ciudadanía puede pedir revocar el mandato s algún miembro del Ayuntamiento.

En la lucha para empoderar al pueblo, además de la revocación de mandato y de las consultas populares, propusimos inscribir en la Constitución de Nuevo León los mecanismos de la democracia directa: el referéndum, el plebiscito, el presupuesto participativo, la acción popular, la iniciativa popular, la voz ciudadana, las contralorías sociales, los consejos consultivos, las asambleas ciudadanas y la afirmativa ficta, así como elevar a rango constitucional la Ley de Participación Ciudadana.

Por tal motivo, en el PT vamos a seguir pugnando porque las grandes mayorías del pueblo de Nuevo León ejerzan los mecanismos de la democracia directa y participen en las decisiones públicas trascendentales para revertir nuestros problemas estructurales de pobreza y desigualdad, de violencia e inseguridad, de corrupción e impunidad.

A pesar de las múltiples trabas a nivel federal y estatal, la lucha seguirá para que nada ni nadie impida que el pueblo ponga y el pueblo quite.

Deseamos a todas y a todos una Nochebuena y ¡Feliz Navidad!