Monterrey.- Lo que debes saber: De diciembre a junio pasados, en Nuevo León el costo de productos de una canasta básica de 30 alimentos escalaron hasta 88 por ciento en el caso más álgido (chile serrano), revela el Índice Nacional de Precios al Consumidor del INEGI.
▪ En casi todos los 30 alimentos que componen el índice, los aumentos contrastan con el primer semestre del 2019, cuando tuvieron bajas significativas y en algunos casos incrementos moderados respecto a este 2020.
▪ En la primera mitad de este año, según el INEGI, sólo tres alimentos arrojaron alzas menores al 5%, siendo los casos de las tortillas de maíz, la zanahoria y la lechuga.
▪ En promedio, las frutas y verduras han aumentado un 13% durante el último año a nivel nacional, porcentaje que debe ser más alto para la Zona Metropolitana de Monterrey, al ser una de las urbes con mayor costo de vida
en México.
▪ De acuerdo a Alejandro Saldaña, subdirector de Análisis Económico de Ve por Más (Bx+), “presiones asociadas a interrupciones en la oferta, los todavía elevados precios de bienes agropecuarios y fuerte demanda por bienes básicos, en el contexto del confinamiento, han incidido al alza en los precios de mercancías alimenticias en recientes lecturas”.
▪ Juan Carlos Anaya, de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), señaló que algunos precios se vieron afectados por menores cosechas, como el frijol y el tomate, y otro motivo fue una mayor exportación, como en el caso del plátano.
▪ También atribuyó el encarecimiento a la mayor demanda de los hogares por el confinamiento por el Covid-19 y a los grandes márgenes de comercialización de quienes venden al consumidor final.
Análisis Altius
▪ Frente a la crisis económica provocada por el COVID-19, el sector alimentos, en especial los supermercados, han visto un aumento en sus ventas, debido al cambio en los hábitos de consumo de la población.
▪ Nuevo León ha sido una de las entidades que más empleo formal ha perdido (se calcula que se perderán alrededor de 100 mil empleos), por lo que la presión económica para esas familias se ve agravada por el aumento en la canasta básica.
▪ Considerando que de acuerdo al Centro de Estudios Económicos de la UANL la recuperación económica para el Estado podría tardar hasta dos años, resulta fundamental establecer políticas de apoyos para familias vulnerables.
▪ Durante esta pandemia municipios como San Pedro y Monterrey han otorgado víveres a población vulnerable.
▪ También la iniciativa Unir y Dar, financiada en parte por el Grupo Monterrey e implementada por Comunidar, ha estado entregado tarjetas para transferencias directivas de efectivo para al menos 17 familias con necesidades básicas.
▪ Además del apoyo humanitario que pudieran a llegar a requerir las familias en condiciones más precarias, debe reiterarse que aquellas personas que han perdido su empleo o viven al día lógicamente seguirán saliendo a trabajar y por tanto, exponiéndose al contagio.
▪ No es casualidad que la ocupación con mayor proporción de contagios de acuerdo a la Secretaría de Salud estatal sean precisamente obreros. Es probable que dentro de esa cifra se encuentren muchas personas que trabajan en la economía informal.
* Reporte19 # 14 / Consultor: Gilberto Miranda / gilberto@altiusconsultores.com