GOMEZ12102020

¿Está regulado el mercado del agua?
Víctor Vela

Nada es más útil que el agua; pero esta no comprará gran cosa; nada de valor puede ser intercambiado por ella. Un diamante, por el contrario, tiene escaso valor de uso; pero una gran cantidad de otros bienes pueden ser frecuentemente intercambiados por éste.
Adam Smith

Monterrey.- Históricamente se reconocidó al agua como un bien económico incomparable, en cuanto a su utilidad, frente al resto de los satisfactores del hombre; sin embargo, fue hasta 1776 cuando Adam Smith explicó cómo, teóricamente, bajo el sistema de mercado, el precio es la expresión del valor en términos de dinero aplicable a todos bienes; no importan las circunstncias, siempre y cuando se cumpla con el principio de que para tener un bien o servicio se tenga que pagar por ellos.

Con fines didácticos, el análisis del mercado –donde el precio único a considerar para cada bien se determina a partir de la interacción entre la oferta y la demanda– tiene como supuesto la presencia del régimen de Competencia Perfecta, un método de intercambio bajo el cual operan –en condiciones de equilibrio conjunto– un número muy grande de compradores y vendedores. Ya en términos apegados a la realidad, el estudio de los mercados hubo de incorporar –al análisis teórico– los regímenes de competencia imperfecta: Monopolio, Oligopolio y Competencia Monopolística.

Para todos casos, el sistema capitalista de producción encontró a la ausencia de regulación, bajo el régimen modelado por Smith, como ideal para integrar el llamado liberalismo económico iniciado el siglo XVIII. Fueron los monopolios naturales, como es el caso del agua, y los oligopolios con miras a coludirse (cartelarizarse), los que llevaron a los gobiernos democráticos a tomar medidas para corregir las imperfecciones de los mercados; no sin que después (siglo XX), apareciera el modelo neoliberal como doctrina sujeta al mecanismo de mercado como solución a los desajustes económicos y de toda índole.

Hace más de tres décadas llegó a México el neoliberalismo, como corriente de pensamiento económico a favor la privatización y la no intervención del gobierno en el mercado, pero sí para coludir el poder económico con el poder político. Pese a la prevalencia del régimen neoliberal, ante la incertidumbre del futuro del agua, en 2016 la Comisión Nacional del Agua (Conagua) utilizó un Diseño de un Sistema Tipo de Regulación de los Servicios de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento, tomando al estado de Sonora como ejemplo, en cuanto a su estructura institucional para el manejo del recurso hidraúlico para el uso urbano.

El documento (disponible gratis en internet) contiene las bases de regulación del mercado del agua, que incluyen las atribuciones legales, y los fundamentos económicos, para que el Estado mexicano controle el suministro oprtuno de agua a los usuario urbanos de todas las cagorías: domiciliaria, uso productivo y utilidad pública.

El sistema de regulación propuesto por la Conagua, diseñado hace seis años, debió aplicase al caso de Nuevo León desde entonces. Ya debían estar en práctica verdaderos programas de optimización en uso del agua; por ejemplo, el estímulo económicamente a quienes probadamente ahorren el agua; y el cobro progresivo a quienes se excedan; pero, ante todo, la puesta en práctica de una política pública para reubicar la industria de alto consumo de agua y promover el uso de agua tratada en el servicio público, la industria, comercio y servicios.