Hablando de libros con Bertha Mónica Treviño Lozano
Eligio Coronado 

Monterrey.- 1.- ¿Qué libros has publicado?
R= «Alambrada» (1992), «Génesis» (2001), «Perfume de mareas» (2011), «Otoño en París» (2018) y «Estrellas fugaces» (2020). Además estoy incluida o mencionada al menos en una veintena de libros.

2- ¿De qué tratan tus libros?
R= Los cuatro primeros son de poesía. Sus temas principales son el amor y el erotismo dentro de un tono mesurado, suave y agradable. Como soy diseñadora gráfica, integro poemas gráficos, caligramas, fotografías y otras anclas visuales para lograr una mayor empatía con el lector. Mi libro más reciente es de corte espiritual: son reflexiones para iluminar la paz interior.

3- ¿Cómo surge la idea de escribirlos?
R= «Alambrada» fue una recopilación del trabajo que había realizado en los talleres de creación literaria en los que participaba. En «Génesis» (el segundo) me di a la tarea de volver poegráficos una cierta cantidad de textos para hacer el libro más atractivo. «Perfume de mareas» y «Otoño en París» sí fueron concebidos con premeditación en momentos muy específicos de mi vida. Con «Estrellas fugaces» se dio un fenómeno parecido al de mi primer libro, en el que se me inspiró a reunir ese material, fruto de canalizaciones y de la contemplación.

4- ¿Cuáles eran tus objetivos al publicarlos?
R= En el caso de mis libros de poemas, compartirme, volcarme, explorarme. Hacer algo bello con las palabras que tanto amo. Como Hansel y Gretel, señalar con migajas de letras mi paso por el mundo. Con «Perfume de mareas» y «Estrellas fugaces» mi intención ha sido inspirar y dar esperanza. Como sabes, el cuerpo y el espíritu se ennoblecen cuando se les alimenta con cariño.

5- ¿Se cumplieron dichos objetivos?
R= Bueno, yo me siento muy bien. He sido constante, perseverante. He logrado darme. Completar mis metas siempre es agradable y disfruto el proceso. Eso es en cuanto a mí. Por otro lado, comprendo que mis lectores encuentran agradable mi obra, que logro encender chispas en sus corazones. Ojalá fuera más sencilla su difusión. Hago lo que está en mis manos por promoverlos, pero la verdad es que me encantaría encontrar mejores maneras para colocarlos al alcance del público.

6- ¿Cómo escogiste los títulos?
R= Básicamente es un proceso intuitivo: elijo varios de mis textos favoritos y siento sus títulos. Así determino el que me parece más llamativo.

7- ¿Qué fue lo más importante de publicar estos libros?
R= ¿Lo más importante? Mmmmh. No podría decirlo. Todo el proceso es deleitable… pero verlos en las manos de mis lectores es la cereza del pastel.

8- ¿Qué sentiste al tenerlos en tus manos por primera vez?
R= Es una alegría sublime. Es como cuando llegas, eslabón por eslabón, a la cima de una montaña rusa y contemplas el horizonte. Es una emoción increíble. Abrir la primera caja y mirar adentro, cómo están acomodados los libros; tomar uno, sentir su textura, su peso, acercarlo a la cara inmediatamente para olerlo… comenzar a hojearlo para constatar que es real… Es mágico, maravilloso.

9- ¿Cómo los promocionaste?
R= Suelo llamar a la prensa para que cubra los eventos de presentación; también busco hacerme entrevistar en televisión y radio. Me gusta donar algunos ejemplares a bibliotecas y escuelas, participar en lecturas y ferias del libro para estar cerca de la gente.

     Otra de mis tácticas de promoción es la grabación de audios para que los interesados se engolosinen con los contenidos que manejo. En 2020 comencé a experimentar con publicidad pagada en Facebook y, más recientemente, he buscado el apoyo de promotores culturales y, en el caso de «Estrellas fugaces», alianzas con profesionales de desarrollo humano.

     A principios de este año abrí mi página web: https://www.berthamonicaescribe.com desde donde pueden solicitarlos y ponerse en contacto conmigo.

10- ¿Qué repercusión tuvieron?
R= Los libros se venden muy bien en las presentaciones y en eventos donde hay sinergia en los mismos temas. La publicidad pagada también funciona bien. Siento que el área de oportunidad es acercarme lo suficiente al lector para que conecte con mis letras. Hay que dedicarle tiempo a darme a conocer y estar disponible en más eventos.

11- ¿Anécdotas, experiencias, satisfacciones vividas con tus libros?
R= Muchas. No pararía de escribir, jajaja. Compartiré una anécdota de cada libro. Cuando buscaba publicar «Alambrada», mi primer poemario, fui guiada hacia la Coordinación General de Proyectos Especiales del Gobierno del Estado de Nuevo León, con Horacio Salazar y Héctor Alvarado, quienes apoyaron mi propuesta incluyéndola en la colección “Águila o Sol”. Luego me enteré que me habían mandado con ellos con ganas de que me rechazaran, jajaja.

     En esa presentación me acompañó María Eugenia Llamas, La Tucita, a quien había conocido durante mi trabajo como redactora en una agencia de publicidad y con quien conecté de inmediato. Ella, tan hermosa, accedió a leer algunos de mis nóveles poemas en esa presentación en la Casa de la Cultura de Monterrey.

     Cuando iba a sacar «Génesis» a la luz (premio de edición entre Conarte y Verdehalago), una vez que había hecho promoción en radio, tv y que tenía ya todo listo para una presentación muy elegante en la librería de la Cineteca, resultó que también mi cuerpo estaba viviendo un “génesis”. Esa mañana fui con mi médico y me puso en reposo absoluto. No se me permitió ir ni en silla de ruedas. Antonio Ramos Revillas, quien entonces trabajaba en Conarte, me dijo: “Es la primera vez que el autor no va a la presentación de su libro”. Ante un lleno total del recinto, mi esposo se sentó junto a Margarito Cuéllar y María Dolores Hernández y le dio voz a una carta donde yo explicaba los motivos por los cuales no estaba presente.

     Otra: «Perfume de mareas» estuvo dando vueltas durante años en concursos y fue rechazado por varias editoriales. Lo intenté incluso con mi querida “mamá Conarte”, con quien había publicado y solía participar en eventos. El dictamen fue poco menos que destructor y rompe-alas. Sin embargo, yo ya no era una autora primeriza, me tragué el orgullo y seguí tocando puertas con tan buena suerte (la suerte no existe) que la importante editorial Miguel Ángel Porrúa con sede en la ciudad de México me pidió hacer una co-edición. Cuando tuve mi libro en la mano, invité a mi contacto de Conarte a la primera presentación. Jijiji.

     «Otoño en París» estuvo en archivo durante años. Lo trabajé mucho. Crecí. Cambié. En un momento determinado dudé si publicarlo o no. Sin embargo, decidí que podía ser inspirador y que era bello en fondo y forma, así que busqué editorial cerca, en mi mismo Monterrey, con mi querida Paty Laborde, directora general de La Naranja Editores. Ahí volqué mis luces y mis sombras. Es un libro hermoso que yo misma diseñé y maquetée.

     Finalmente hablaré un poco de «Estrellas fugaces», mi primer libro de corte espiritual. También estuvo en mi lista de propósitos durante años, pero no fue hasta esta pandemia y en un espacio de tiempo difícil emocionalmente para mí, que encontré la fuerza (y la docilidad) para recabar todos los textos ya escritos, maquetarlos, diseñar y convertirme en autora de Amazon.

12- A la distancia, ¿cómo los juzgas?
R= Todos son bellos y tienen su propósito encantador. Quien me haya leído desde «Alambrada» hasta «Estrellas fugaces» se podrá dar cuenta de cómo he cambiado mi discurso. De mis temas eróticos y románticos de metáforas rebuscadas de mis inicios a la palabra más cristalina y espiritual de mis temas actuales. Empero, hay una constante tangible: mi deseo de crear empatía con el lector por medio de lo visual, de fotografías, ilustraciones, viñetas o poemas gráficos.

13- ¿Cómo recomendarías tus libros?
R= Todos ellos son de textos breves, atractivos visualmente, que proyectan sus partes luminosas y oscuras, con sus deseos universales de amor y conexión.

14- ¿Qué aconsejarías a los autores que quieren publicar un libro y no saben cómo?
R= Que no desistan. Que si tienen la intención de publicar no cesen de tocar puertas, participar en concursos de edición y acudir a editoriales. Presenten un texto limpio, pulido y lo más terminado posible. Actualmente hay muchas editoriales independientes y facilidades para colocar sus libros en línea que les facilitarán esta tarea. Yo misma me pongo a su disposición para orientarlos y darles la ayuda que pudiesen necesitar como asesora editorial.

15- ¿Tienes otros libros en el tintero?
R= Siempre, jajaja. Y ya comienza a clarear el panorama para sacar el primero de ellos: un libro de cuentos y poemas infantiles con la colaboración de la artista de origen argentino Pato Gil Villalobos, creadora de la obra de la portada de «Estrellas fugaces», happy artista del amor y del color.