Monterrey.- Con renovada esperanza vemos como el reto de promulgar la nueva Ley de Educación del Estado sigue adelante, ahora con los trabajos emprendidos por la Comisión de Educación, Cultura y Deporte de la LXXVI Legislatura del Poder Legislativo y por la Secretaría de Educación del Poder Ejecutivo encabezado por Samuel García Sepúlveda desde el 4 de octubre.
El Decreto de Ley que tuvimos la responsabilidad de dictaminar y de aprobar cuando presidimos la citada Comisión durante la LXXV Legislatura, pero sobre el cual el entonces gobernador Jaime Rodríguez Calderón ejerció su derecho de veto, fue objeto de una nueva mesa de consulta ciudadana en el Congreso del Estado la semana pasada.
Lo anterior, por tratarse de un tema que la actual Legislatura incluyó en su Agenda Temática Mínima para resolverlo en el Primer Periodo Ordinario de Sesiones de su Primer Año de Ejercicio Constitucional.
Nuestro reconocimiento a todos quienes participaron en la nueva consulta y aportaron sus valiosos análisis y propuestas para enriquecer el Decreto y también a quienes plantearon actuar en forma responsable para no violentar el proceso legislativo relacionado con el veto y no imponer una Ley que sea de difícil aplicación para las autoridades educativas.
Apreciamos particularmente lo manifestado por la nueva titular de la Secretaría de Educación, Sofíaleticia Morales Garza, quien se comprometió a trabajar de la mano con el Congreso del Estado para implementar las reformas que permitan a Nuevo León contar con una educación de calidad y con un desarrollo sustentable, inclusivo y equitativo para todas y para todos, mediante 10 puntos prioritarios que espera se vean reflejados en el proyecto de Ley:
1. Primera infancia.
2. Regreso seguro a la escuela.
3. Escuelas dignas y abiertas.
4. Pedagogía de la emergencia, educación socioemocional y formación de valores.
5. Evaluación formativa y evaluación sumativa.
6. Certificación de docentes e identificación de buenas prácticas.
7. Tecnología como eje de la transformación educativa.
8. Formación dual e impulso a la empleabilidad.
9. Fortalecimiento del sistema universitario y,
10. Nuevo modelo educativo de Nuevo León.
Pero, especialmente respaldamos los argumentos que nuestra secretaria de Educación expuso para señalar a la primera infancia como la prioridad número uno, al sostener las siguientes consideraciones:
“La primera infancia debe ser la columna vertebral de todos nuestros esfuerzos, pues existe una correlación muy importante entre las niñas y los niños que reciben estimulación temprana y su éxito educativo en el futuro.
La atención a la primera infancia desde el nacimiento hasta los 6 años de edad es un periodo fundamental, donde se definen muchas de las condiciones que determinarán el desarrollo de la vida adulta.
El cuidado de la primera infancia es una problemática que no depende sólo de la política educativa, sino que también implica atender la crisis de pobreza que afecta al 34.2% de la niñez de 1 a 6 años del Estado. Una estadística lamentable que nos coloca en el lugar 29 de las 34 Entidades Federativas.
En el evento donde el Gobernador y yo firmamos el Pacto por la Primera Infancia, celebrado a mediados del mes de octubre, señalé los consejos de James Heckman, Premio Nobel de Economía en el año 2000, quien declaró que la mejor inversión que un país o un Estado puede hacer para el desarrollo, es invertir en la primera infancia, en especial en las niñas y en los niños que provienen de familias con mayores carencias. Esto significa dirigir los apoyos a la población vulnerable, como madres, padres y cuidadores para acompañarlos en la crianza compartida de sus niñas y niños menores de seis años.
También significa incrementar la oferta y la cobertura en la demanda de la educación inicial, garantizando espacios seguros y personal preparado; es decir, el tránsito de Estancias Infantiles a Centros de Atención Infantil (CAI), donde la Secretaría de Educación acompañe los procesos pedagógicos y de formación de las distintas figuras educativas. Será necesario, por tanto, invertir en agentes educativos para hacer las visitas domiciliarias y acreditar a nuevos CAI con figuras educativas nuevas y con una base pedagógica”.