Monterrey.- Aquella mañana, después del desayuno, como era costumbre cada fin de semana, nos reunimos en nuestra biblioteca. Justo cuando nos disponíamos a releer “El Mundo al Final del Tiempo”, de Frederic Pohl, entraron mis nietos Noé Sebastián y Diego Yudel, de manera misteriosa y solemne. Me sorprendió su visita en sábado por la mañana, ya que por lo general los fines de semana duermen hasta después de mediodía.
Con su habitual erudición en temas de tecnología digital, Noé dijo: “¡Buenos días, abuelo! Diego y yo queremos proponerte que seas el primero en probar un dispositivo electrónico que hemos estado construyendo durante dos años. Hemos investigado y nos hemos asesorado en una comunidad virtual a la que pertenecemos. Hemos adquirido periféricos y desarrollado un software que permite 'viajar virtualmente' en el tiempo y observar los distintos escenarios de la historia de la humanidad tal y como ocurrieron. Hemos llamado a este proyecto tecnológico único en su género ‘DNT’.”
Noé, un talentoso diseñador e instalador de hardware, así como experto en todos los periféricos de una computadora, reunió el equipo tecnológico y lo conectó al ordenador, que previamente había sido cargado con el software diseñado por Diego, un genio en matemáticas. El proyecto DNT me pareció excelente, y aún más emocionante fue la misión que mis dos geniecillos tenían reservada para mí.
“Abuelo –dijo Noé– Diego y yo creemos que tú eres la persona ideal para hacer uso de nuestro equipo, pues sabemos que te apasiona la historia de la Física y las Matemáticas. Con nuestro equipo, podrás observar los hechos históricos relacionados con estas disciplinas, sobre los cuales has escrito con tanta pasión y enseñado a tus estudiantes a lo largo de varias generaciones.”
Diego continuó explicando: “Nuestro equipo puede realizar Holo transportación en el espacio-tiempo. Hasta ahora, solo se habían realizado Holo transportaciones en el espacio. Si bien el espacio y el tiempo conforman una entidad única llamada espacio-tiempo, las diferencias en el tiempo, dadas las condiciones de gravedad o de movimiento de un objeto, como lo establece la Teoría de la Relatividad, hasta ahora son mínimas, e incluso imperceptibles en muchas ocasiones. Por ejemplo, las diferencias entre el tiempo medido en lo alto de un edificio con respecto al suelo, o entre el tiempo medido en un avión en movimiento y un punto situado en tierra firme. Aunque esto ya lo sabemos desde hace un siglo, cuando Einstein publicó la Teoría Especial y General de la Relatividad, el sentido común no siempre nos alerta sobre estos cambios.”
“El Holo transportador que hemos creado –añadió Noé– permite teletransportar hologramas de una persona en el espacio y el tiempo, colocando al ‘teletransportado holográficamente’ en una cabina situada en el laboratorio construido en la terraza de nuestra casa y presionando las coordenadas espaciotemporales de donde se quiera transportar. Así es como comienza esta emocionante aventura que espero disfrutes.”
Es importante aclarar que el Holo transportador solo transporta el holograma, tal como lo hacen la NASA u otras empresas cuando desean recibir asesoría o revisión de maquinaria por un experto situado en cualquier parte del mundo. Se transporta el holograma y este interactúa con las personas que se encuentran en el lugar donde se "Holo presenta". La interacción se da únicamente a través de ondas de luz y sonido, es decir, se puede ver y escuchar al holograma, pero no se puede tocar. Así es como se abre una nueva perspectiva para la historia desde el punto de vista de la Física.
(Esta es la introducción de un libro de ciencia que proyectamos publicar si “los astros se acomodan”, como dice un amigo.)