Monterrey.- Lo que debes saber: Una de las medidas más impulsadas a nivel global para el retorno a actividades en las grandes ciudades es el impulso a la movilidad no motorizada.
▪ La implementación de ciclovías emergentes y calles peatonales han presentado una solución para el regreso a la “nueva normalidad”, ya que la circulación al aire libre previene contagios, permite una mayor distancia que en el transporte colectivo y privado y además ayuda a mejorar la calidad del aire.
▪ La SEDATU lanzó el plan emergente “Movilidad 4S para México: Saludable, Segura, Sustentable y Solidaria”, con la finalidad de incrementar la seguridad sanitaria en la movilidad y “tomar el regreso a la 'nueva normalidad' como punto de partida para transformar la manera en que nos movemos a través de estrategias desarrolladas en colaboración con todos los sectores y disminuir la inequidad en la vía pública” según resaltó el Secretario Román Meyer.
▪ El Norte publicó que mientras que cuatro ciclistas fallecieron la semana pasada, en el área metropolitana la mayor parte del presupuesto para movilidad se invierte en infraestructura para el automóvil y casi nada para ciclistas y peatones.
▪ En el 2018, según la más reciente información del INEGI, la entidad se ubicó en el tercer lugar nacional en ciclistas arrollados, con 359.
▪ Guadalajara, Ciudad de México e incluso Hermosillo tienen cientos de kilómetros de infraestructura ciclista permanente y han agregado emergentes. En cambio, en el área metropolitana de Monterrey, sólo San Pedro, con 6.5 kilómetros y Escobedo, con 2.4 kilómetros, han implementado ciclovías emergentes en la contingencia por el Covid-19.
▪ El Municipio de Monterrey y el Estado anunciaron que implementarán una bici ruta en la Avenida Cuauhtémoc, en el Centro de la Ciudad. Además, la Administración municipal informó que dentro de dos meses también conectará la ciclovía del Multimodal Zaragoza-Zuazua con el Distrito Tec.
▪ El urbanista Moisés López destacó que el Artículo 134 de la Ley de Movilidad y Accesibilidad del Estado de Nuevo León establece la creación de una red vial estratégica que garantice la movilidad en casos de emergencia, como la contingencia sanitaria por el virus.
Análisis Altius
▪ A pesar de promoverse como una de las ciudades más desarrolladas de México, Monterrey sigue rezagada en la cultura de la movilidad, permaneciendo en el modelo anticuado de ciudad estadounidense que privilegia el automóvil privado y las avenidas de alta velocidad.
▪ Existe un problema profundo respecto a la concepción de lo que se entiende por “soluciones” –y por ende, como deseable– en materia de movilidad: por años la población ha concebido las obras viales como la respuesta, a pesar de que está comprobado internacionalmente que entre más se construye infraestructura para el auto, más aumenta el tráfico.
▪ Esto genera un círculo vicioso: una opinión pública de que pide inversiones en calles, avenidas, puentes y pasos a desnivel; y candidatos/autoridades que siguen destinando promesas y recursos a este tipo de obras.
▪ Aunque sólo un 36% de la población neoleonesa se mueve en auto propio, es a ésta a quien se prioriza a la hora de tomar decisiones de infraestructura pública. El sistema de transporte público, una piedra angular para prevenir el avance del COVID-19 en la mayoría de los países, durante la contingencia ha permanecido prácticamente sin cambios.
▪ Si se pretende combatir el rezago en movilidad sustentable y garantizar la seguridad vial en todos los medios de transporte, las ciclovías emergentes serían un buen primer paso para dar un ejemplo de que otra movilidad es posible.
* Reporte19 # 14 / Consultor: Gilberto Miranda / gilberto@altiusconsultores.com