Fotografía: Alejandra de la Fuente

Marea verde en Nuevo León

Stefanía Bárcenas Padilla*

Monterrey.- Cada 28 de septiembre, desde hace veintinueve años, se conmemora el Día por la Despenalización del Aborto, declarado en el V Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe celebrado en Argentina en 1990. Para entender el por qué las feministas de México estamos a favor de abortos seguros y voluntarios, así como la legalización del mismo, debemos ver el fondo del asunto. Para ésto, comparto algunos datos duros que muestran otros enfoques (además de lo moral y religioso) en los que deberíamos centrar la discusión del aborto.

     En México hay al menos 200 mujeres en cárcel por aborto, muchas de ellas por abortos espontáneos, abortos prematuros, emergencias obstetricias e incluso víctimas de violación con derecho a un aborto, además, en su aplastante mayoría son mujeres pobres de zonas rurales y áreas indígenas, que no tienen los recursos e información para una defensa.1 Lo cierto es que, en nuestro país, abortan sin complicaciones las mujeres ricas y mujeres con recursos (ya sea de redes de apoyo, de información o económicos), mientras que las pobres son acusadas, sentenciadas, mueren, presentan graves complicaciones o arriesgan su integridad, vida y salud. Con el estigma negativo al aborto, no es de asombrarse que ésta sea entre la segunda y cuarta causa de muerte materna (MM)2 en México, cuando no debería ser así, la OMS (septiembre 2019) señala que la mayoría de las complicaciones de MM son prevenibles o tratables.

     Otros datos preocupantes son que, nuestro país ocupa el primer lugar en embarazo adolescente3, e investigaciones demuestran que el 70% de los embarazos de niñas, los padres son adultos4, ¿realmente estamos hablando de embarazo adolescente/infantil? ¿O se trata de abuso infantil? Es éste caso, las autoridades deberían brindar información objetiva, certera y oportuna de opciones de interrupción a las niñas y adolescentes pues son víctimas de un delito. La carencia de información para estas niñas y adolescentes provoca peligre su vida, ya que estudios realizados para la OMS demuestran que mueren 92% más mujeres adolescentes y niñas por llevar a cabo sus embarazos que por terminarlos.5

     Existe una deficiencia nacional en las campañas de salud sexual, reproductiva y de planificación familiar. El desconocimiento generalizado provoca que se limiten los derechos, aumente la criminalización y reduzca la atención de salud de las mujeres.

     Por ejemplo, en Nuevo León (NL) las causales por las cuales una mujer puede abortar legalmente no se modificaron a pesar de la reforma al Art. 1o de la Constitución local, estas son: grave daño a la salud, peligro de muerte y violación. Pero este tipo de reformas abonan a la desinformación y limitación de derechos, constituyendo una violación a los derechos humanos de las mujeres. Los marcos restrictivos en torno al aborto no evitan su práctica, pero sí conducen a que las mujeres recurran a procedimientos clandestinos e inseguros. En cambio, despenalizar el aborto permite que las mujeres tengan opciones, accedan a procedimientos seguros y eviten arriesgar su vida y salud.
Tal como se demostró en el informe de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México el 24 de abril del presente año, con legislaciones de Interrupción Legal del Embarazo hay una disminución de abortos y morbilidad materna,
además, la tasa de mortalidad bajó a cero a partir de su legalización en 2007 6, cifra menor a estándares internacionales.

     El Estado está fallándole a las mujeres, ya que el derecho a decidir está respaldado jurídicamente en nuestra Constitución (Art. 1 y 4), así como en al menos 5 Tratados Internacionales ratificados por México sobre el acceso a aborto legal y seguro. La sentencia de 2012 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en los términos del artículo 4.1 de la propia Convención Americana, de la cual México es parte, estableció jurisprudencia (Caso Artavia Murillo y otros Vs. Costa Rica) relativa a que el embrión no es persona, supuesto básico necesario para hablar de titularidad de derechos. Por lo que, ante todas las leyes de México, las niñas, adolescentes y mujeres somos sujetas y titulares de derecho. Al contrario, los embriones y fetos no lo son, a pesar de que el Código Civil del Estado de NL puede reconocerles algunos derechos (herencia, donaciones y legitimización filial), éstos no se reconocen hasta que el producto nazca, Art. 23 Bis del mismo Código: la personalidad jurídica de las personas físicas se adquiere por el nacimiento y se extingue por la muerte. La relación entre el embrión/feto y la mujer es inseparable, pues los primeros no son individuos y la única forma posible de existencia que tienen es a través de un organismo que sí es persona y sujeta de derecho: la mujer.

     Las barreras a un aborto sin penas, legal y seguro representan un obstáculo importante para el desarrollo inclusivo, equitativo y sostenible de las niñas, adolescentes y mujeres mexicanas. Es prioritario informarnos, transformar nuestro discurso y abordar al Aborto como problema de Desigualdad, Injusticia, Discriminación, Violencia de Género, Salud Pública, Justicia Social y Reproductiva, así como un incumplimiento a los derechos humanos y detrimento la calidad de vida de las mujeres.

     En general, los movimientos por el derecho a decidir EXIGIMOS:

     - Despenalización. No queremos a mujeres procesadas ni en situación de cárcel por un proceso biológico común en la vida reproductiva de las mujeres.

     - Que se elimine de todos los códigos penales el aborto como delito.

     - Acompañamos la iniciativa del Código Penal Único siguiendo los más altos estándares internacionales en derechos humanos donde no se tipifique el aborto como delito, salvo en los casos donde la mujer sea forzada a realizarlo.

     - Los derechos no se consultan. La vida y la libertad de las mujeres NO se negocia. Una consulta ciudadana debe estar fundada en una educación democrática y sin estigmas morales, hacerlo en el contexto actual, influirá negativamente en la interpretación de la realidad distorsionando la legítima defensa de la libertad de las mujeres y sus derechos humanos.

     - Que sea ley. Ocupamos que el Estado Mexicano esté obligado a brindar total acceso a un aborto seguro, así como el salvaguardar la vida, salud e integridad de todas las mujeres que decidan interrumpir libremente su embarazo. Proveyendo de información objetiva y acompañamiento.

     - Acceso a un aborto libre, voluntario, gratuito, seguro, digno con atención adecuada para las mujeres que así lo decidan. Todas las maternidades deben ser libres, voluntarias y/o elegidas. Si una mujer decide, que nada la detenga.

     - Educación integral de la sexualidad al alcance de toda la población desde los niveles más básicos, con bases científicas y libre de estigmas.

     - Que se adopten medidas para prevenir y atender la violencia sexual, así como atender todas las recomendaciones de la Convención para erradicar todas las formas de discriminación contra las mujeres (CEDAW).

     - Brindar anticonceptivos sin estigma, de calidad y gratuitos en escuelas, edificios públicos y centros de salud, así como información sobre planificación familiar y métodos anticonceptivos.

     - Cumplimiento puntual de las Normas Oficiales de Salud, para lo cual se debe capacitar de manera continua y permanente a todo el personal de salud.

     - Abstenerse de utilizar ideologías religiosas, morales o políticas que vulneren el Estado Laico y democrático.

     - No criminalizar a las mujeres por ejercer sus derechos avalados por la Constitución y Tratados Internacionales de los cuales México forma parte.

     - Crear mecanismos y programas efectivos y eficientes para la prevención de embarazo infantil, embarazo adolescente y embrazo no intencional. Nosotras, feministas, sí estamos a favor de la VIDA, de la vida de las niñas, adolescentes y mujeres sujetas de derecho.

     Como población queda informarnos, acercarnos a las organizaciones que trabajan el tema, comentar y discutir, quitarle el peso negativo teniendo un pensamiento crítico, organizarnos y participar socialmente para el cumplimiento de estas demandas y el ejercicio pleno de nuestros derechos humanos básicos y fundamentales.

     Estamos seguras que la Marea Verde aumentará sus caudales hasta que llegue el momento en que las mujeres de México y el Mundo no tengamos que salir a las calles para defender nuestros derechos y reivindicar nuestra libertad, autonomía y capacidad de decisión.

* Colectiva Hablemos de Aborto; directora de Arkali Espacio Cultural.

1 Verónica Cruz, 1 sept. 2019. https://zonafranca.mx/politica-sociedad/las-libres-buscan-amnistia- para-mujeres-criminalizadas-por-abortar y https://vanguardia.com.mx/articulo/en-prision-200- mujeres-por-abortar-en-mexico


2 Secretaría de Salud, Dirección General de Epidemiología 2018 y 2019. E Informe GIRE sobre Mortalidad Materna <http://informe.gire.org.mx>

3 Según datos de la Organización para la Cooperación y el Crecimiento Económicos (OCDE).
4 Datos del INEGI (noviembre de 2018).


5 Estudio realizado en la base de datos de Política de Aborto Global, de la OMS, por la Dra. Raffaela Schiavon, consultora y especialista en salud sexual y reproductiva.

6 Boletín: ILE, a 12 años de la reforma al Código Penal de la Ciudad de México. Gobierno de la Ciudad de México.