PEREZ17102022

MICROCUENTOS PARA PENSAR
Choque generacional
Tomás Corona

Monterrey.- ¿Qué saben los jóvenes de hoy de las reglas sociales de cortesía? Lo mismo que la tía Clotilde sabe de las redes sociales y la tecnología. Es fácil comprobarlo. A ellos les vale madre que un anciano vaya de pie en el transporte colectivo cargando senda mochila y prefieren, si les da su regalada gana, cederle el asiento a una voluptuosa muchacha y que el viejito se joda. Las tías le tienen pavor a las computadoras por temor a descomponerlas, que exploten o a contagiarse de algún misterioso virus que habita en el endemoniado aparatejo.

Ellos enfrascados en su celular son incapaces de abrir una puerta para que alguien pase o ayudar a una ancianito a cruzar la calle y tampoco saludan cuando llegan a una reunión familiar. Las tías y tíos no entienden los tecnicismos usados en el ámbito tecnológico y prefieren ir a pagar los recibos a las dependencias o bancos porque dudan que la honestidad pueda ser ejercida en la redes digitales.

Los ninis y juniors, enclaustrados en su mundo virtual se volvieron antisociales, batallan para emitir un discurso estructurado y ni siquiera pueden entablar una conversación congruente con sus semejantes. Los adultos mayores, las tías incluidas, añoran aquellos tiempos de convivencia sentados en las mecedoras afuerita de su casa y siguen contando fantásticas historias medio inventadas o medio vividas por ellos y se ponen a llorar en los rincones del olvido cuando se sienten solos.

Los jóvenes de hoy coexisten en una realidad virtual que paradójicamente los aísla aunque tengan la posibilidad de comunicarse con el mundo entero. Los viejos cohabitan en una dolorosa realidad que también los aísla y los condena y guardan sus penas y alegrías en su desvencijado corazón en el más cruel y recalcitrante abandono.

Esto del choque generacional nunca había sido tan descarnado e injusto como en este nuevo siglo. Las nuevas generaciones ya no siguen las enseñanzas, consejos y tradiciones de las anteriores en este mundo globalizado, procaz, indolente y que avanza inexorablemente hacia su destrucción.

¿Será la extinción del homo sapiens la solución a todos los problemas que existen en el planeta?