GOMEZ12102020

MICROCUENTOS PARA PENSAR
Compulsión
Tomás Corona

Monterrey.- Una de las compulsiones más terribles es la relacionada con la higiene. Es desesperante ver como este tipo de personitas se lavan las manos treinta veces al día, barren y trapean ocho veces los pisos aunque luzcan relucientes, le sacan brillo a la cocina cada vez, después de preparar los sagrados alimentos, mueven los muebles dos o tres veces por semana para que no haya polvo, usan en exceso productos antisépticos, como el cloro, en detrimento de la salud de la familia, lavan la ropa inmediatamente después de quitársela, desinfectan trapos, cepillos y estropajos consuetudinariamente. En fin, son intolerantes a cualquier tipo de mancha por muy pequeña o grande que sea, y ni se diga a la basura, sin siquiera imaginar que un universo de microbios, bacterias, hongos e insectos cohabitan en su mismo hogar, en su propio lecho, como los ácaros y las moscas.