PEREZ17102022

MICROCUENTOS PARA PENSAR
Gente chismosa
Tomás Corona

Monterrey.- Habitan en frágiles burbujas que explotan al primer roce de su descubierta murmuración. Conviven, succionando con sus afiladas fauces, la energía positiva de sus coetáneos. Degustan con fruición los conflictos intervecinales que luego transforman en cuentos de terror.

Acicateadas por el insomnio, elucubrando perversiones, jamás duermen. Alaban al demonio en sus conjuros verbales cuando enuncian sus vocablos hirientes. Son abrumadoras e incontables sus “fake news” que luego encubren con un sobreactuado “yo no sabía”.

Deambulan, indemnes, entre sombras enemigas, utilizando su morbosa labia y su libidinosa habilidad para escabullirse. Son como desventuradas hidras que les brotan cabezas cada vez que se las cortan cuando mienten. Acaban siempre inoculadas de soledad, por la vulgar ligereza de su vocifugio que aleja a todos los que las rodean.

Se han hecho expertas en su papel de judas cuando regalan besos infestados de arsénico y clavan su puñal en la espalda. Envidian la paz interior de sus allegados y se empeñan en desestabilizarla con sus mal intencionados comentarios.

Destruyen la armonía del universo entero con el cortante filo de su lengua. Putrefactos por dentro, con su hipócrita máscara de “buenas gentes”, acaban siempre tirados en la basura de la ignominia y el olvido.