Coro2310

MICROCUENTOS PARA PENSAR
Llegaron cartas
Tomás Corona

Monterrey.- En la actualidad han caído en desuso. Antiguamente constituían un medio infalible de comunicación, como las cartas de Relación de Hernán Cortés que daban cuenta de las maravillas de América y la injuriosa conquista; las complejas y teorizantes que redactó finamente nuestra admirada Juana Inés; las que se escribían otros poetas como Neruda, Darío, o las dolorosas cartas de Kafka a su demoníaco padre. ¿Y quién no recuerda las amorosas cartas que se escribían nuestros abuelos, las cuales dejaban en un lugar secreto que solo la bien amada sabía encontrar…? Hoy apenas se utilizan con fines estrictamente comerciales. Pero hay otras cartas…

     En un pueblo de México, bajo el sopor de la tarde, llegó el desvencijado taxi…

- ¿Sr Casimiro X…? “Ay” le mandan…

     Y extendió el amarillento sobre que Don Casimiro X agarró un tanto nervioso…

- Pero, ¿Quién lo manda…?

- No sé, no me dijeron nada, solo que se le entregara esta carta a usted, personalmente…

     Y el viejo taxi se regresó sin más por el camino empedrado por donde vino…

     El viejo campesino cultivador de limones con los que apenas sobrevivía y que vendía en la ciudad en su vieja camionetita que tanto cuidaba, abrió, trémulo, la cartuja aquella y se quedó estupefacto… Comenzó a deletrear con los ojos desorbitados…

- Don Casimiro X, después de saludarlo, paso a decirle lo siguiente…

     Después de una boba explicación del motivo y mencionando el peligro que correría su querida familia si no hacía lo que le ordenaban, la carta terminaba así…

- …Y tiene usted hasta el sábado 12 de junio al mediodía, en el lugar acordado, para entregar los 650 mil pesos que le solicitamos o usted y su familia pagarán las consecuencias…

     Faltaba solo una semana para esa fatídica fecha… El viejo cayó de rodillas implorando al cielo que el contenido de aquella carta fatal, no fuese cierto…