Rendir cuentas a mamás y papás
Lupita Rodríguez Martínez
Monterrey.- Los Centros de Desarrollo Infantil (CENDI) del Frente Popular ‘Tierra y Libertad’ somos una Institución de Clase Mundial en Educación Temprana en contextos de pobreza, al implementar una cultura basada en la calidad y la excelencia educativa, en la innovación científica y tecnológica, en las mejores prácticas con sólidos sistemas y procesos de trabajo, como garantes del cumplimiento de metas y objetivos del proceso educativo.
Todo esto con el noble fin de que niñas y niños vivan su infancia felices, con plenitud, con atención pertinente de sus necesidades de salud, con oportunidades de aprendizaje y en un entorno cálido, seguro y amoroso, propiciando así el óptimo desarrollo de sus facultades y potencialidades innatas en los niveles de educación inicial y preescolar (de los 45 días de nacidos a los 6 años de vida), etapa considerada por las neurociencias como la más crítica, por ser la de mayor dimensionamiento en la arquitectura cerebral donde se establecen las bases de la salud física, emocional, habilidades e inteligencia de todo ser humano a través de complejas interacciones de factores genéticos, biológicos y psicosociales.
Somos una institución de educación pública única, líder en México y América Latina, porque desde hace más de dos décadas pusimos en marcha un modelo de excelencia en la gestión, mejora continua e innovación, con procesos sistemáticos de evaluación externa de la calidad de nuestros programas y servicios. Y gracias a las evaluaciones de organismos especializados hemos cosechado más de 45 reconocimientos. Desde el 2001 somos considerados por la OEA como Modelo de Referencia de Educación para países en desarrollo, desde el 2005 somos uno de los 7 Modelos más exitosos en el planeta del Banco Mundial y desde el 2013 los CENDI son la única institución de educación preescolar seleccionada por la OCDE dentro de su inventario de mejores prácticas en su proyecto “Ambientes Innovadores para el Aprendizaje”. A todos estos reconocimientos se suma la certificación y recertificación anual durante más de 17 años consecutivos del Distintivo H, que cumple con la Norma Oficial Mexicana NMX-F605 NORMEX-2018, avalada por la Secretaría de Turismo, en cuanto a higiene, manejo y preparación de alimentos.
Por todo ello es justo reconocer al equipo de trabajo por su gran vocación, profesionalismo, compromiso, responsabilidad, sensibilidad y calidez. Dichas competencias son fortalecidas a través del programa de capacitación continua y desarrollo profesional que nuestra institución promueve.
La realidad de marcados contrastes que vivimos a nivel global, por el uso de las tecnologías que modificaron los paradigmas de producción y consumo, así como por el modelo económico neoliberal que concentró, como nunca, el poder económico en unos pocos y cuyo fracaso se evidenció con la pandemia del coronavirus, es la oportunidad para que los gobiernos resuelvan los grandes desafíos de la degradación ambiental, de la pobreza, la desigualdad, la violencia, la corrupción, la antidemocracia, la injusticia y muchos otros más y para avanzar en los objetivos de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.
En los CENDI visualizamos este difícil panorama como una excelente oportunidad para replantear cuáles son las competencias que necesitan niñas y niños para vivir en un mundo cambiante y construir un futuro mejor. Sin duda, la educación es un factor crucial para el desarrollo de toda sociedad y tenemos claro que la educación temprana es el primer gran paso en el camino hacia un crecimiento sostenible y una sociedad pacífica y justa. La sustentabilidad y la sostenibilidad del planeta se detenta en las nuevas generaciones y a pesar de que hoy por hoy no conocemos con certeza los retos del mundo que les tocará enfrentar como adultos, sabemos que van a encarar un entorno complejo y con grandes desafíos. Por ello, nuestra prioridad es formar niñas y niños resilientes, emocionalmente competentes, con pensamiento crítico, con gran capacidad de adaptación al cambio y creatividad en la solución de problemas y, sobre todo, con una gran inteligencia colectiva y sentido de comunidad.
En el ejercicio anual de rendir cuentas a las mamás y papás de los 5 mil 300 niños y niñas CENDI que cursaron el Ciclo Escolar 2020-2021, señalamos como el mejor resultado la ejecución de la modalidad de educación a distancia, la cual pusimos en marcha desde el ciclo pasado y cuenta con distintas variantes para satisfacer las necesidades educativas y formativas.
Sin embargo, el Covid-19 exhibió las grandes limitaciones de los sistemas educativos e hizo visibles las enormes diferencias en que vive y aprende nuestra niñez. Mientras pocas familias pudieron acceder a modelos educativos eficientes para continuar su formación, la gran mayoría que asistía a la escuela pública accedió a modelos muy limitados, cuya gran catástrofe en términos de rezago educativo y deserción escolar no conocemos con certeza, pero se estima que son millones las niñas, niños y adolescentes que abandonaron la escuela y que tal vez muchos de ellos nunca más regresarán a las aulas.