Respuesta al V Informe de Gobierno
Dip. María Guadalupe Rodríguez Martínez*
Monterrey.- Es un honor dar respuesta al Quinto Informe de Gobierno en representación de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado de Nuevo León.
En el 2015 asumió el Poder Ejecutivo el primer Gobernador que ganó la elección como candidato independiente, situación inédita en Nuevo León y en toda la República. Ello trajo rompimiento de paradigmas políticos. Uno de ellos que el Gobernador no contara con diputados de su proyecto político, lo que cambió la dinámica entre los poderes, pues el Poder Legislativo cobró mayor autonomía.
La experiencia en esta y la pasada Legislatura debe servir para preservar esa autonomía, máxime cuando hay reelección de legisladores para profesionalizar la función, pues una mejor democracia no es posible sin mejores demócratas. Es necesario también construir un andamiaje que regule el diálogo entre poderes. Por ello, lo invito a que trabajemos juntos en un proyecto que nos permita heredar a la siguiente Legislatura y al siguiente Gobierno la base para una mejor interlocución.
El Congreso acusa de recibido su Quinto Informe, invitándolo a desarrollar una transparente y productiva Glosa con su equipo de trabajo, para evaluar cada aspecto del desarrollo de sus actividades, para dar un justo balance y para que la rendición de cuentas sea un ejercicio de democracia participativa.
Este año marcó un antes y un después para el mundo entero. De haberse salido de control el Covid-19 en Nuevo León, de nada habría servido llenar estadios con camas, pues no era posible contar con equipo médico suficiente, ya que el capital humano hospitalario requiere de años para su formación.
Es aquí, señor Gobernador, donde me permito señalar la necesidad de robustecer la formación de personal médico, principalmente médicos comunitarios que practiquen la medicina social y atiendan a los sectores de mayor penuria, para convertir el derecho humano a la salud en un auténtico derecho universal.
De igual manera, la educación para la nutrición saludable y la práctica habitual de deportes deben ser políticas fuertemente impulsadas junto con la salud psicosocial de niños y grupos vulnerables, para aminorar el impacto de la violencia y de enfermedades como ansiedad, depresión, psicosis y suicidios.
Reconocemos que el Ejecutivo ha hecho un adecuado manejo de la crisis sanitaria, así como de la reapertura económica. Decisiones como transparentar el número de contagios y decesos en hospitales públicos y privados, apoyarse en las escuelas de medicina de las universidades, la reconversión hospitalaria, el alto número de pruebas gratuitas, el uso obligatorio del cubre bocas y el semáforo con los indicadores para evaluar riesgos, son, sin regateos ni lisonjerías, correctas.
Estos aciertos deben permanecer en mejora continua y hacer esfuerzos por el distanciamiento social en el transporte, los mecanismos de geo-referenciación y el seguimiento del hilo de la cadena de contagio, así como establecer cercos sanitarios en colonias de alto contagio y un confinamiento diferenciado, separando los grupos productivos de bajo riesgo de aquéllos con alguna comorbilidad.
El manejo de las finanzas es otro acierto que debe reconocerse. Permitió resistir los embates de la crisis económica derivada del confinamiento, que llevó a una histórica baja de los niveles de recaudación fiscal, tanto de recursos propios como federales. El reto es hacer más con menos y ello requiere el esfuerzo de todos: Federación, Estado, Municipios y órganos autónomos.
Reconocemos también el cierre del penal del Topo Chico. Nunca más un autogobierno. El sistema de rehabilitación penitenciaria, a pesar de estar basado en el trabajo y la educación para la reinserción social, requiere una política de nueva generación, orientada al desarrollo de valores humanos y competencias laborales.
En seguridad pública nunca se debe bajar la guardia. Es conveniente escuchar la sabia voz de las abuelas: “no porque se limpie la casa un día se piense que al día siguiente no se debe hacer también”. La tarea de prevención y combate del delito es una tarea constante, persistente e inacabada. No baje la guardia señor Gobernador y menos en su último año de gobierno.
El Estado cuenta ya con una Ley de Movilidad Sostenible y Accesibilidad, pero no cuenta aún con un sistema de movilidad ágil, eficiente, transparente, inteligente, limpio y accesible, que sea un detonante de la actividad productiva y que permita a la población recuperar para sí, tiempos de ocio y de familia.
La contaminación es de los problemas estructurales más graves. Afecta la vida saludable y el futuro generacional. El seguimiento a las recomendaciones del Centro Mario Molina, Premio Nobel mexicano recientemente fallecido, es el mejor homenaje que le podemos brindar a este valiente científico y, a la vez, el mejor legado que niñas, niños, adolescentes y jóvenes pueden recibir de nuestra parte.
Un plan ambiental integral, es posible. Un plan de retiro gradual de industria contaminante, es posible; la creación de grandes parques y bosques urbanos, es posible. Todo ello con financiamiento de fuentes verdes para el desarrollo.
Hoy en día parece una tendencia polarizar, exacerbar, sembrar odio, división, desconfianza y desesperanza para allegarse seguidores. Iniciado el proceso para renovar los poderes Ejecutivo y Legislativo, así como los Municipios, pido a todos los actores políticos a que, sin negar su ideario, hagamos campañas con propuestas edificantes, encaminadas a aportar soluciones a nuestros males sociales, porque la política no es para dominar al otro o para acumular bienes materiales, la política tiene como propósito servir al pueblo y procurar su bienestar sin excluir a nadie.
Nadie es mejor que el otro, sólo somos diferentes. Formamos parte de una sola comunidad humana, unida por los mismos lazos de dignidad y sentido de trascendencia, porque somos un nosotros habitando una casa común.
Ciudadano Gobernador está por concluir su mandato y es en momentos aciagos cuando aflora el carácter. Extiendo la mano de este Poder Legislativo para que apoyándonos en los valores de nuestra democracia, trabajemos juntos hasta la superación de la crisis sanitaria y económica.
Nuevo León es grande y requiere demócratas grandes.
Concluyo recordando a José Martí: “La única fuerza y la única verdad que hay en esta vida es el amor, el patriotismo no es más que amor, la amistad no es más que amor” y me atrevo a completar la frase diciendo que la solidaridad no es más que amor, la fraternidad no es más que amor y la paz es vivir en el amor.
* Presidenta del Congreso del Estado.