GOMEZ12102020

TIRO DE ESCOPETA
Quince epitafios
Ismael Vidales Delgado

Monterrey.- Epitafio deriva del griego “epitaphios” que significa “oración fúnebre”. Para nosotros son las citas o frases que se escriben ocasionalmente en la tumba del difunto. Algunas veces los epitafios son sentenciosos, humorísticos, filosóficos y más. Los que se conocen como “epitafios célebres” raras veces son ciertos, la mayoría son inventos de la gente y no están inscritos en una lápida y a veces nos encontramos con cenotafios (tumbas vacías).

1.- Al gran compositor alemán Johann Sebastian Bach (1685-1750) se le atribuye: "Desde aquí no se me ocurre ninguna fuga". Su sepulcro está en la Iglesia de Santo Tomás, de Leipzig (Alemania) sin ningún epitafio.

2.- Al genial humorista estadounidense Groucho Marx se le atribuye “Perdonen que no me levante” sin embargo, no tiene tumba sino un nicho en el Eden Memorial Park de Los Ángeles en la plaquita se lee: "Groucho Marx 1890-1977" y una estrella de David.

3.- El célebre cantante estadounidense Frank Sinatra –dicen- que sugirió el epitafio siguiente “Lo mejor está por llegar”.

4.- El genial poeta chileno Vicente Huidobro, dejó un epitafio de lo más insólito: “Abrid la tumba. Al fondo de esta tumba, se ve el mar”.

5.- La escritora norteamericana Dorothy Parker con mucho humor e ingenio escribió su epitafio: “Perdonad el polvo”.

6.- El genial escritor Edgar Allan Poe murió el 7 de octubre de 1849. Fue enterrado en la parte trasera del cementerio de Westminster, sin una lápida, una tumba identificada sólo como "No. 80". No hubo sermón y casi ni asistentes al entierro. Posteriormente, el 17 de noviembre de 1875, se realizó un nuevo entierro, esta vez, con un momento en su honor con un epitafio de su poema más famoso, El cuervo: “Dijo el cuervo: Nunca más”.

7.- El genial escritor, famoso por sus epigramas sarcásticos Francisco de Quevedo murió el 8 de septiembre de 1645 a los 64 años. En su lápida se grabó uno de sus sonetos: “Qué mudos pasos traes, ¡oh! muerte fría, pues con callados pies todo lo igualas”.

8.- Molière, el genio de la literatura universal autor de “Tartufo” o “El misántropo”, dejó con gran humor, del que hacía gala: “Aquí yace Molière el rey de los actores. En estos momentos hace de muerto y de verdad que lo hace bien”.

9.- El escritor y filósofo español Miguel de Unamuno de la generación del 98 nos dejó un epitafio tan genial como él en el cementerio de Salamanca: “Méteme, Padre eterno, en tu pecho, misterioso hogar. Dormiré allí, pues vengo deshecho del duro bregar”.

10.- Mel Blanc, el actor que doblaba la voz a Porky, Bugs Bunny, el Pato Lucas, Piolín y Pablo Mármol nos dijo adiós con su famoso "That's all folks" ("Eso es todo amigos").

11.- Al escritor y periodista español Miguel Mihura se le atribuye el epitafio: “Ya decía yo que ese médico no valía mucho” pero en su tumba no hay nada que lo pruebe.

12.- El famoso pistolero del Oeste Jesse James fue asesinado a traición por su mejor amigo. Su madre escribió en su tumba: "Asesinado por un cobarde y traidor cuyo nombre no merece figurar aquí".

13.- El extraordinario primer ministro inglés Winston Churchill escribió su epitafio, con el humor que le caracterizó: "Estoy listo para encontrarme con mi creador. Si mi creador está listo para encontrarse conmigo es otra cosa".

14.- William Shakespeare el genial escritor universal inglés William Shakespeare murió a los 53 años, y se despidió con el siguiente epitafio: "Buen amigo, por Jesús, abstente de cavar el polvo aquí encerrado. Bendito sea el hombre que respete estas piedras y maldito el que remueva mis huesos".

15.- El escritor humorístico español Enrique Jardiel Poncela murió el 18 de febrero de 1952 de cáncer a los 50 años y nos dejó un epitafio que todos hemos podido corroborar en sepelios "Si quieres los mayores elogios, muérete".