PEREZ17102022

¡Maestros y maestras transformadoras!
Lupita Rodríguez Martínez

Monterrey.- Las maestras y los maestros son agentes fundamentales del proceso educativo y, por lo tanto, su contribución es clave y resulta crucial para la trasformación social de nuestro país.

La reforma constitucional en materia educativa, publicada el 15 de mayo del 2019 en el Diario Oficial de la Federación, reconoce así el trabajo magisterial en la misión y la visión de transformar a la sociedad mexicana.

A cinco años de la histórica enmienda al Artículo Tercero Constitucional, este Día del Maestro y de la Maestra el magisterio se mantiene a la expectativa del Estado Mexicano para que termine por sentar las nuevas bases del Sistema Nacional Educativo.

Entre la gran mayoría de las trabajadoras y de los trabajadores al servicio de la educación, existe el convencimiento de continuar con el proyecto de la Nueva Escuela Mexicana y, sobre todo, de profundizar sus avances en el llamado Segundo Piso de la Cuarta Transformación de México.

Para el próximo sexenio, la Federación ya no tendrá como pretexto la pandemia del Covid 19 para cumplir su rectoría, a través de la Secretaría de Educación Pública (la SEP), sobre el Sistema para la Carrera de las Maestras y de los Maestros en sus funciones docente, directiva o de supervisión.

Asimismo, para que en coordinación con las 32 Entidades Federativas, la SEP implemente dicho Sistema, conforme a los criterios del Artículo Tercero que orientan la educación:

a) Se basará en los resultados del progreso científico, luchará contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios.

b) Será democrática, considerando a la democracia como un sistema de vida fundado en el mejoramiento económico, social y cultural del pueblo;

c) Será nacional para atender nuestros problemas, aprovechar nuestros recursos y defender nuestra independencia política, económica y cultural;

d) Contribuirá a la convivencia humana bajo los ideales de fraternidad e igualdad de derechos, evitando privilegios de razas, de religión y de grupos;

e) Será equitativa para el ejercicio pleno del derecho a la educación de las personas y combatirá las desigualdades socioeconómicas y de género;

f) Será inclusiva con base en el principio de accesibilidad, al tomar en cuenta las diversas capacidades, circunstancias y necesidades del educando;

g) Será intercultural al promover entre personas y comunidades la convivencia, el respeto y el reconocimiento de sus diferencias y derechos;

h) Será integral, ya que educará para la vida, con el objeto de desarrollar en las personas capacidades cognitivas, socioemocionales y físicas;

i) Será de excelencia, entendida como el mejoramiento integral constante que promueve el máximo logro de aprendizaje de los educandos;

En que un maestro o maestra eduque con base en todos estos criterios orientadores de la educación, radica transformar nuestra sociedad. Por ello, la SEP debe fortalecer a las instituciones de formación docente, en especial a las escuelas normales regionales y rurales. Además, consolidar al sistema integral de formación, capacitación, actualización y evaluación diagnóstica que no afecten derechos laborales, para que profesoras y profesores cumplan con los objetivos y propósitos del Sistema Educativo Nacional.

Es un avance que la admisión, promoción y reconocimiento del personal para ejercer la función docente, directiva o de supervisión, se realice ahora a través de procesos de selección, donde los aspirantes participan en igualdad de condiciones y requisitos del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros y del Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación.

Son procesos públicos, transparentes, equitativos e imparciales, ya que los conocimientos, aptitudes y experiencias en el desarrollo integral de los educandos son fundamentales para las y los educadores, más allá de que se aprueben recursos crecientes para cumplir todo lo dispuesto en el Artículo 3o.

¡Feliz Día Maestras y Maestros por educar para transformar!