CRÓNICAS PERDIDAS
Buena marcha de los celos
Gerson Gómez
Monterrey.- Esta es la tensa calma: precede a la tromba: al principio del fin: la buena marcha de los celos:
Fiscalizada en la rendición del estatus: somos pareja: no me asusta: ni cómo lo piense la rentera: sus ahijadas: las bonitas conductoras de televisión: los vecinos: egoístas acaparadores de la calle: cada quien su asunto: cada uno su vida:
Ghedi aparenta bastante tranquilidad: su aversión o los tabús no facilita mucho: nos debilita: es notorio: los enredos dan pie a múltiples malinterpretaciones: le pienso como alguien tan próximo: para superar la querella interna: los dos caminando: no en estas avenidas polvorosas: estrechas: poco amables para el peatón: con animales sueltos: muertos casi vivos pudriéndose al aire libre: los rostros sudorosos: agobiados: cansinos: despojada la esperanza: no: sino al lado del mar: idílico: atrayendo las buenas energías: cayendo la tarde: los dos vestidos con lino blanco: bronceados: con el calor disminuyendo: la frescura próxima del agua:
Nos reunimos a resolver la equidistante invasión: ante tanto impulso romántico llevas mano: aun me sepa vulnerable: doblamos el largo de los atuendos antes de tomar asiento en la arena: pareces un genio: listo para conceder los tres deseos en la mitología de la lengua: meter los pies en el mar no es una catástrofe: sino quedar con las inútiles ganas: son tan pocos los errores para perder el tiempo con un coscorrón: desde vestidos a desnudos sabemos cómo hacerlo sin desaprovechar el tiempo: he decidido adelgazar: ponerme en forma: en dieta de claveles blancos: despojar el disfraz de carnaval: te lo cuento: esa es la principal razón de la infertilidad: valdrá la pena el sacrificio:
En la sala central de la imaginación llevamos la bitácora: la sangre se vuelve polvo: la consagración del crecimiento conjunto inclina la balanza sutil a la carcajada abierta: siempre el mar presente en mis relaciones: me deslumbra el impulso natural modificando a los disidentes: quienes se han marchado: aun al dejar la huella positiva jugamos a la guerra: declaro la guerra en contra de mi peor enemigo es: entonces tu nombre ya no es Ghedi: sino Rusia: o China: o España:
Deberé correr lo más lejos: en ello va la vida: la geografía nos salvará de todo mal: alcanzar la protección en la colinas: tendrás por acierto al gritar alto: heraldo determinante: entonces voltearé esperando el recuento de pasos: si de elefante: cinco: siete: diez: da lo mismo: o de hormiga: pocos: estrechos: pegaditos: hasta aproximarte: soy estatua de sal: la esposa de Lot: en huida de Sodoma: el país indefenso a punto de ser invadido por tu imperio: los marines: la armada: tus manos: los besos: espero tengas consideraciones: tus embajadores ofrezcan ofrendas de paz: garantías a los vencidos: sin encadenarme a la frontera del sueño:
Soy católica romana: requiero de ternura antes de derrumbarme: tu triunfo son mis victorias: aun sea el campo de batalla: el trofeo incontaminado ante tu machismo: la menos guapa: la más honesta: las opiniones de lo físico son subjetivas para los sediciosos: sucederá una vez: otra: millones:
En las mejillas sonrojadas hay cierta resignación de corte intelectual a lo fantástico:
Me llevaré en el hombro tu fusil: la vanidad es el tablón flojo de la mesa en donde nos reunimos todas las mañanas a desayunar.
