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Cincuenta oraciones impúdicas
Joaquín Hurtado
- Gracias a los fanáticos de la vida embrionaria, la muerte materna resucita.
- Cuando la vida se eleva a discurso, lo humano se rebaja a recurso.
- Legislar el amor materno es tan necio como legalizar el azul del cielo.
- El litigio a favor de la vida justifica el homicidio.
- El embarazo ocurre a la madre para despojarla de sí.
- El óvulo fecundado es tan similar al humano nacido como una nube al océano.
- El útero: campo de guerras sanguinarias.
- Toda imposición sobre el misterio del amor destroza el milagro de la vida.
- El endometrio es un lugar callado, ajeno al estallido del orgasmo.
- El tirano busca dominar al ovario por sus huevos.
- Forzar el nacimiento de un ser, contra la voluntad de la madre, es peor que matarla.
- Las gallinas no inventan a los huevos, ni los huevos piensan en las gallinas.
- El deseo del Estado es incompatible con el deseo de las mujeres.
- Sólo los caníbales codician la carne humana.
- Cuando se teorizan nacimiento y muerte nos convertimos en conceptos.
- El poder nos vigila desde el momento de la concepción, para cuidarse de nosotros.
- La madre: vehículo desechable del sermón.
- Ningún embrión tiene futuro sin el tiempo de la madre.
- El principio que mueve a los defensores del embrión por encima de la madre, es criminal.
- La maternidad voluntaria atenta contra el interés del amo.
- El sueño de controlar la matriz humana acaba en pesadilla.
- El dulce proyecto de dar vida puede consumir a los progenitores.
- El totalitarismo del embarazo forzado alimenta el aborto voluntario.
- Dar a luz hijos no deseados aumenta las tinieblas.
- La reproductividad se esteriliza si se la condiciona con decretos.
- Reprodúcete, que Dios perdona.
- Implicación política de la vagina: las consecuencias del parto.
- El acto de la concepción es siempre sedicioso.
- En la concepción de un nuevo ser comienzan todos los pecados.
- Concebir nueva vida es un accidente donde se cruzan los muertos.
- La lógica de la maternidad es por fortuna irracional.
- La vida fetal lo justifica todo, menos a la madre.
- Defender embriones sacrificando mujeres, es siniestro. Lo contrario es funesto.
- La mujer no es incubadora de ninguna especie.
- Si la meta del nacer es la muerte, lo que queda en medio es la ilusión de inmortalidad.
- La garra que codicia el vientre materno busca apoderarse del mundo.
- Castigar a la mujer que aborta es insensato; alabarla es disparate.
- Hay tanto drama humano en un óvulo fecundado, como en una gota de rocío.
- La existencia humana se impone a pesar de sus defensores o detractores.
- Violar a una mujer es muy sencillo, basta con afirmar que Dios se hizo hombre.
- El confesionario encarece la fábula sexual.
- El aborto espontáneo o inducido es falsa dicotomía mientras se alimente con la culpa.
- La contracepción también es cultura.
- Entre lo normal y lo anormal habita el Diablo.
- El coito aún se pretende reducir a mera posición de los genitales en el espacio del deseo.
- La brújula machista y torcida de la Iglesia no se enderezará rompiendo leyes civiles.
- La vida sexual sigue ardiendo en el fuego inconfesable de la herejía.
- Cualquier cosa que nos brinde placer pasa por la aduana de la responsabilidad.
- Entre el confesionario y el diván puede desatarse una barbarie política.
- La inquietud sexual de los adultos inventó el caos erótico de la infancia.
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