Es un documental acerca de un fenómeno religioso que nace en el desierto norestense de México, a partir de la muerte de su líder espiritual, José Fidencio Síntora Constantino.
Este interesante personaje nace en 1898 y muere a los 40 años, en 1938.
El Niño Fidencio llegó a una próspera hacienda en Espinazo, Nuevo León, como sirviente. Ahí empezó a cobrar fama al atender algunos partos y lograr ciertas curaciones que para la gente eran milagrosas. Su fama llegó a tal punto que el mismo presidente de la República de su tiempo, Don Plutarco Elías Calles, acudió a verlo para que lo sanara de un problema que tenía en la piel. El Niño Fidencio lo atendió y el presidente, como recompensa, le puso el agua potable. Constantemente le mandaba vagones de tren llenos de ayuda para sus enfermos.
Más de 40 mil personas vivían en este desértico lugar recibiendo las curaciones del Niño, sobrenombre que le pusieron por su inocencia, su carácter noble y por que no desarrolló los rasgos sexuales secundarios entre los que se encuentra la voz de niño que nunca llegó a madurar.
Para muchos Fidencio fue un ser de luz, un súper dotado con capacidades especiales ya que, en condiciones insalubres, operaba con vidrios de botella, sin que hubiera hemorragias ni dolor.
En un momento dado, este personaje empezó a adquirir un carisma de santo, la gente llegó a venerarlo a tal punto que con sólo tocarlo sentía el alivio.
La muerte de Fidencio fue traumática para sus seguidores y pacientes. Muchos se quedaron a vivir en Espinazo, cerca de los lugares que para ellos eran santos, donde Fidencio rezaba, caminaba, curaba etc.
Los que se fueron, continuaron la tradición entre sus descendientes quienes regresan a Espinazo dos veces al año, en marzo y en octubre, a visitar su tumba.
Así, poco a poco, se fue arraigando más y más una fe en el Niño Fidencio que se ha conformado ya como una toda una religión. Existen cuatro grupos principales: La Iglesia Fidencista Cristiana, registrada por la Secretaría e Gobernación en 1994, totalmente independiente de la Iglesia Católica; los fidencistas que dirige la anciana Cipriana Zapata, quienes desean que el Niño Fidencio sea reconocido por la Iglesia católica; Los grupos independientes dirigidos por las cajitas, que no pertenecen a ningún grupo fidencista y los católicos que veneran al Niño Fidencio como un santo mas.
La Iglesia Católica no reconoce al Niño Fidencio como un candidato a una posible canonización, incluso, muchos sacerdotes católicos mexicanos los consideran blasfemos.
El fidencismo es un fenómeno espiritista porque piensan que el espíritu de Fidencio posee a algunas personas al entrar en trance. Estas son las famosas “cajitas” o “materias”. Fidencio, entonces, puede seguir curando y aconsejando a las personas a través de ellas.
El Niño Fidencio, cobra vida, la gente lo tiene muy cerca porque puede hablar con él, puede sentir su presencia, su consuelo, esto provoca muchas veces la curación. La cantidad de testimonios de personas curadas por la fe es innumerable.
El Fidencismo ha trascendido por todo México y el sur de los Estados Unidos.
El documental está realizado a base de testimonios de muchísimas personas que de una u otra manera han tenido que ver con el tema, desde ancianos que conocieron a Fidencio en vida, hasta obispos católicos, así como gente joven y niños que aseguran recibir constantemente las bendiciones y curaciones de este santo Folk.
FICHA TECNICA
TÍTULO: NIÑO FIDENCIO De Roma Espinazo.
GÉNERO: Documental antropológico.
FORMATO: Video Digital y Analógico transferido a 35mm