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SOLIDARIDAD CON CIUDAD JUÁREZ

Ricardo Morales Pinal

 

Comparto plenamente los sentimientos de Tere Almada, expresados en su escrito a 15Diario “JUÁREZ SE NOS MUERE DE TRISTEZA”. Y los comparto y los entiendo porque al igual que ella he trabajado con muchachos preparatorianos del subsistema de CBTis; lo hago  desde hace más de 25 años como maestro frente a grupo. Me integré  en el CBTis 94 de Michoacán, gracias a la solidaridad de mis compañeros que me rescataron después de que la derecha universitaria comandada por el  tristemente célebre Dr. Piñeyro  consideró que la universalidad de las ideas propia del quehacer universitario estaba bien para el discurso pero no para la vida académica diaria en que se forman los profesionistas y de cuajo cortó con toda expresión política que no se plegara a su propia visión respecto del ser y quehacer  de la institución.

Conocí por primera vez (1983) un sistema educativo dirigido a captar a sectores juveniles de escasos recursos que por lo mismo no estaban en posibilidad de transitar una carrera universitaria larga y onerosa; jóvenes entusiastas e  inteligentes aferrados a su núcleo familiar con la mirada puesta en el horizonte de la superación personal. Compartí con ellos el árido campo de las matemáticas y la física y gracias a su entusiasmo y dedicación pudimos convertirlo en un motivo de encuentro para compartir, como dice Tere Almada en su escrito, “reflexiones, preocupaciones y búsquedas”.

De regreso a estas tierras norteñas continué con mi trabajo académico en el mismo subsistema y descubrí que modismos aparte de cada región del país, el alumnado de este subsistema de educación media superior tiene un perfil más o menos común. Los podemos encontrar ya egresados después de tres años de estudio laborando en diversas instituciones públicas, en centros de trabajo tanto de carácter industrial como de servicios en donde se distinguen por su disciplina y entrega al trabajo convertidos, al paso del tiempo, bien en cabezas de familia, bien como sostén o apoyo  de sus padres y hermanos, bien integrados en tecnológicos o universidades en donde, según expresión de sus propios maestros se distinguen por su disciplina e integración a los procesos académicos.

Por eso hoy nos muerde el alma ver a un grupo de jóvenes del CBTis 128 de Ciudad Juárez masacrados por una caterva de imbéciles armados hasta los dientes y nos indigna  más aún ver a una sarta de gobernantes encabezados  por el presidente de la república (espurio para unos, inútil para todos) prejuzgar de entrada y decir, al momento de la masacre, que se trataba de “un pleito entre pandillas” y el día de hoy, con la cola entre las piernas “ofrecer disculpas” a sus familiares por aquella expresión.

Nos señala la señora Tere Almada en otra parte de su denuncia en donde nos comparte con profundo sentimiento los detalles del duelo en el CBTis 128: “La maestra Norma, directora, y el inge Carlos, subdirector, con gran tacto y delicadeza, daban el pésame a las familias, hablando de que siempre iban a estar en la memoria de la escuela.” Y yo me pregunto: ¿y el Subdirector de Enlace Operativo de la Zona correspondiente?; ¿y el Subsecretario de Educación Media Superior y el Director General de la DGETI? ¿Y el SNTE con su PANAL?

Porque CBTis 128 forma parte de un sistema adscrito a la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial que cuenta con 429 planteles educativos a nivel nacional, de los cuales 168 son CETIS y 261 CBTIS  y casi  300 CECYTES que corresponden a un sistema descentralizado, atendiendo con esta infraestructura a más de medio millón de estudiantes. Y ahí es en donde está la fuerza de la institución para reclamar justicia pronta y expedita. Porque no basta con la presencia de los altos funcionarios en Juárez para la respuesta mediática que, al parecer, es lo único que sabe hacer el gobierno ante tan trágicos acontecimientos.

Nos comparte Tere en otra parte de su escrito: “Después de allí, la misa y un acto cargado de dolor y solidaridad, con los cuerpos de 3 de los jóvenes asesinados en el CBTIS 128, donde apoyamos el desarrollo del Programa ConstruyeT…” Un programa, digo yo, dirigido a la formación-autoconstrucción de los valores personales y desarrollo de la responsabilidad consigo mismo y su entorno  que integrado con otros como el de fomento a la salud, prevención de adicciones, cuidado del medio ambiente, medicina preventiva, tutorías, además de los clubes deportivos y culturales integran a la casi totalidad de los alumnos inscritos en el plantel. A más de los encuentros estatales y nacionales de cultura y deporte; los festivales académicos, etcétera, nos hablan de un ambiente de trabajo creativo y productivo.

La muerte de estos tres jóvenes, víctimas inocentes de la violencia desatada y sin control, no puede, no debe de quedar impune. Los alumnos y maestros del CBTis 128 de Ciudad Juárez deben saber que no están solos; que en cada rincón de esta maltratada patria hay voces hermanas que al igual que ellos libran una batalla diaria y sistemática contra ese gran flagelo que es la ignorancia y que al igual que ellos poco a poco se integran a la demanda de justicia para esos jóvenes cuyos nombres nos regala la señora Tere en una expresión que revela el cariño que les tiene: Brenda, Rodrigo y Juan Carlos.

 

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