587 23 de julio de 2010 |
¿Quién detiene a Felipe Calderón? Guillermo Lozano
El IFE dice que Calderón violó la ley electoral pero que no lo puede sancionar. El SME y los mineros no pueden contener y revertir el atraco a sus derechos. Las denuncias y advertencias de intelectuales y académicos son cínicamente desoídas. Ya se prepara un nuevo atraco a la nación, favoreciendo ilegalmente a Televisa (aparte de la entrega de la fibra óptica) y nadie puede impedirlo. La entrega de PEMEX y la energía eléctrica continúan sin obstáculos.
La cruzada de Calderón contra la mafia sigue su escalamiento de la violencia que le permitirá seguirse reforzando y parapetando tras el ejército y la marina avituallados con préstamos de gobierno belicoso USA. Ejército y Marina son refugio de los que Calderón se cree “el comandante en jefe”.
Un estado fallido en la gobernabilidad y destruido en la economía, que ya hasta produce críticas en sus propios patrocinadores, quienes se han visto afectados en sus negocios. Calderón ha generado un impulso dogmático a los intereses de su concepto de globalización que ni la élite soporta y ahora externa sus críticas, sobre todo de los pocos que aún tienen actividad productiva real como la CANACINTRA.
La última acción va contra el área en donde no hay concesiones de este régimen, con los trabajadores del país. En un “hachazo” a las jubilaciones en donde hasta los pensionados de “cuello blanco” se verán afectados. ¿Quién detiene a ésta máquina insensible e inhumana que se le llama hoy el “espuriato” de Calderón?
En un esquema simple pero lógico y democrático dentro del sistema capitalista, los empresarios invierten su dinero generan empleos de donde obtienen sus utilidades en sus procesos de valor agregado producido por todos “los factores de la producción”. De ahí se pagan los impuestos los cuales son puestos a disposición del gobierno en turno, teóricamente elegido por la mayoría, para que con responsabilidad y visión de estado, se haga buen uso de él, apoyándose en las políticas públicas y realizando así la distribución de la riqueza recaudada a favor de los requerimientos prioritarios de la sociedad.
Pero, ¿cómo y por qué nos perdimos de la ruta ideal? Una respuesta verdadera la encontraremos en el libro de Andrés Manuel López Obrador La mafia que se adueño de México… y el 2012.
Pero la pregunta que sigue es: ¿qué debemos hacer todos los afectados por la barbarie política existente? Ya aparecen los firmes exhortos, denuncias y análisis de Claudio Tapia, María Elena Padilla, Víctor Alejandro Espinoza, Carlos Manuel Sabines, Francisco Gómez Maza, Asael Sepúlveda, Chava, a los que me adhiero, pero, ¿cuál es la agenda ciudadana, conjunta, para lograr impedir que ese “futuro totalmente incierto y preocupante” nos alcance? Para compartir, enviar o imprimir este texto,pulse alguno de los siguientes iconos: ¿Desea dar su opinión?
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