La teta asustada y el lirismo kitsch

Alejandro Martínez

La teta asustada es un retrato lúdico de las condiciones marginales que puede vivir una mujer indígena. A partir de un relato certero y sin ningún tipo de lástima por los personajes, Claudia Llosa presenta a los personajes no desde una perspectiva social que hubiera tumbado la película, sino desde un lirismo kitch y un humor oculto, poco común en el cine de contenido social.

Presentada recientemente en el marco del Festival de cine Latinoamericano en Monterrey, Nuevo León, La teta asustada, relata la historia de Fausta, una indígena peruana que tiene el mal de la teta asustada, mal que consiste en tenerle un pavor total al sexo. Este miedo es ocasionado por su obsesión a la violación de que fue objeto su madre por parte de guerrilleros de Sendero Luminoso o por soldados. Para evitar ser violada por cualquier hombre, Fausta tiene una papa en su vagina, lo cual le ocasiona mareos y sangrados. Aunados a esos problemas Fausta tiene que conseguir el dinero para llevar a su madre muerta al pueblo de donde son. Consigue un trabajo como sirvienta con una pianista, con la cual comenzará una relación musical muy particular. Fausta, interpretada por Magaly Solier, encuentra en el canto la forma de sacar todo aquello que ella se niega. Es un personaje estoico que encuentra en el dolor y en el silencio a sus únicos compañeros, solo en la confidencia del jardinero de la casa donde trabaja encuentra una forma de salir de su silencio.

Alejándose por completo de la formula fácil del realismo mágico latinoamericano que en los últimos años se ha vuelto lugar común a la hora de contar un relato de corte indígena. Y acercándose al relato desde una perspectiva minimalista y realista, y con toque de humor kitsch. Partiendo de una interesante premisa la teta asustada se presenta como un filme de una renovadora frescura. Pues el filme se aleja por completo del tratamiento de melodrama social. Lo que nos presenta Claudia Llosa es presentado no como algo extraordinario sino como algo completamente cotidiano, algo que es parte de la cotidianeidad del pueblo marginado del Perú.

La teta asustada segundo filme de Claudia Llosa directora peruana que anteriormente había realizado la producción, Madeinusa (Perú, 2006), es un trabajo que representa una de las propuestas más interesantes del cada vez más interesante cine latinoamericano. El trabajo de Claudia Llosa ha sorprendido a la crítica y ha conquistado festivales como el Festival Internacional de Cine de Berlín, donde recibió el Oso de Oro. Su anterior filme Madeinusa, era un relato donde se conjugaban elementos de una historia extraordinaria, eso sí, sin caer en el manido realismo mágico. En ese filme se contaba la historia de un pueblo donde es abolida la noción de pecado, todo durante la celebración religiosa que va de la muerte de Cristo a su resurrección. El filme fue nominado al Oscar a mejor película extranjera en la pasada edición de estos premios de la academia cinematográfica de los Estados Unidos.

Para compartir, enviar o imprimir este texto,pulse alguno de los siguientes iconos:

¿Desea dar su opinión?