618 6 septiembre 2010 |
ANÁLISIS A FONDO Canadá, necesitado de mano de obra en muchas regiones La mediática centra su atención en la dramática situación de los migrantes mexicanos, centroamericanos y sudamericanos en busca del “Sueño americano”, pero no dice nada de los que cruzan el enorme territorio de las montañas y planicies y desiertos estadounidenses en pos del sueño canadiense, que está servido en bandeja de plata, siempre y cuando los migrantes no tengan antecedentes penales violentos. Con todo, muchos mexicanos –el 90% de los 10,000 solicitantes de refugio en 2008- trataron de ingresar al dominio británico a través de la puerta de atrás, como alguna vez dijo el ministro de migración canadiense, Jason Kenney, en Calgary, en un discurso ante miembros de la Cámara de Comercio de aquella ciudad. Y es que, desde hace años, es creciente el número de mexicanos que gozan de un nuevo vuelo directo de México a Calgary para reclamar el estatuto de refugiado en la ciudad. Y “saltar (a Canadá) por la puerta de atrás es inaceptable para el gobierno canadiense y para una cada vez más creciente opinión pública de aquel país. Hay cientos de miles de personas que esperan pacientemente en un intento de establecerse en Canadá a través de medios legales, pero las autoridades de ese dominio creen que eso no es justo. No es justo para la gente subirse a un avión; llegar a Canadá y solicitar asilo, incluso si no cumplen con la definición de refugiados, es la opinión del gobierno de Stephen Harper. El 2008, 339 solicitudes de refugio mexicanas en Calgary fueron remitidas a la Junta de Inmigración y Refugiados de Canadá, más de cuatro veces que en 2006. México es ahora el principal país de las solicitudes de refugio en Calgary. Pero el asilo no es el camino. El gobierno canadiense estaba dispuesto a no restringir la inmigración, a pesar de que el desempleo estaba in crescendo debido la recesión. El año antepasado, dio la bienvenida a alrededor de 250,000 inmigrantes. Y es que Canadá se enfrenta a una escasez de mano de obra a largo plazo, por lo que el gobierno no va a cerrar el grifo de la inmigración sólo para tener que volver a activarlo más tarde, pero no en condiciones de refugiados. Alberta y Columbia Británica necesitarán un promedio de 600,000 trabajadores extranjeros e inmigrantes en cinco años, para hacer frente a sus necesidades económicas por el envejecimiento y jubilación de los trabajadores locales. Sigue habiendo una escasez aguda de fuerza de trabajo en el mercado laboral en algunas empresas, industrias y regiones. Y el gobierno cree que lo peor que podría hacer, durante este tiempo de dificultades económicas, es matar de hambre a los empleadores de mano de obra. Los inmigrantes no tienen necesidad de reclamar el estatuto de refugiado. Canadá cuenta con abundantes recursos y espacio, y cualquiera que decida ir a trabajar (siempre que no tenga antecedentes criminales violentos) lo puede hacer con facilidad y sin burocracia. Hay muchos canadienses, sin embargo, que se molestan por la aceptación a los inmigrantes, diciendo que quitan trabajo a las personas que ya están aquí. Aquí hay una respuesta simple. Windsor Ontario, y el resto de Canadá, pueden ser un refugio para los inmigrantes mexicanos que intentan escapar de la persecución que sufren en los Estados Unidos de Norteamérica y disfrutar de la vida canadiense como ciudadanos libres o residentes legales y ganarse la vida como los demás, y no requieren de un estatus especial. Así que Canadá puede ser el nuevo sueño de muchos emigrantes mexicanos que buscan una vida mejor. Pero no, como lo advierte Kenney, por la puerta de atrás del estatuto de refugiado. No han necesidad de ello. Si a usted, amigo lector, no le está yendo bien en el “American way of life”, o las infames condiciones de vida que le otorga el modelo mexicano, por qué, en vez de mirar hacia los Estados Unidos de Norteamérica, voltea sus ojos hacia Canadá. No estoy diciendo que será fácil. No estoy asegurando que allá no será usted mal visto por prieto. Pero lo cierto es que, independientemente del color de la piel, la economía canadiense requiere de mucha mano de obra, que en el contexto canadiense podría ser barata, pero seguramente será más atractiva que morirse de hambre en el campo mexicano, y vivir a salto de mata en territorio estadounidense, sin papeles, sin avales, y lo peor de todo: dejar la zalea en el camino, sin documentos, sin agua, en cualquier recodo, o morir asado en el desierto o masacrado por presuntos sicarios del narcotráfico. http://analisisafondo.blogspot.com/
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