Guerra de los quesos
Miguel Treviño Rábago

Reynosa.- El origen. Los permisos para que operen los casinos de juego en México los otorga la Secretaría de Gobernación. De los 561 que están funcionando, sólo 306 son legales; 241 son ilegales. Los gobiernos de los estados y los ayuntamientos no tienen facultades para dar permisos para ese tipo de negocios. Luego entonces, es el gobierno federal el responsable de vigilar su funcionamiento dentro de la ley. Si como dicen, esos negocios son grandes “lavaderos” de dinero sucio, esa es responsabilidad de la Secretaría de Hacienda. Dicho lo anterior, son responsables Vicente Fox, Santiago Creel, Felipe Calderón, Francisco Blake y Ernesto Cordero por otorgar cientos de permisos y fomentar así la proliferación de la delincuencia en torno a estos casinos, que además han causado la ruina económica de muchos hombres y mucho más mujeres.

Jugándole al vivo
Felipe Calderón, que por la regular tarda mucho en reaccionar a las tragedias públicas, pues aparece siempre días después de que ocurren, ahora, curiosa y rápidamente se apareció en Monterrey y rodeado de un impresionante aparato de seguridad (como ha sido su costumbre en 5 años) y con el riguroso traje negro y acompañado (como es también su costumbre) con su mujer Margarita Zavala igual de luto, montaron una “guardia” con una corona sin flores frente al casino incendiado, le tomaron la foto de rigor, sin faltar las televisoras, y salió corriendo para la Ciudad de México. Fin del teatro calderónico. Se lavó las manos culpando a la delincuencia organizada y el desafortunado “evento” le sirvió para justificar por qué tiene en virtual estado de sitio a México, con miles de soldados en ciudades y carreteras.

Jugada sucia
Un evento grave y doloroso como lo es quemar vivos a 52 seres humanos en un casino de Monterrey, tan grave como los 49 niños quemados vivos en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, es usado entonces para tratar de salpicar al gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina del PRI, y al alcalde de Monterrey, Fernando Larrazábal, que es del PAN. Los dos reaccionan y acusan al gobierno federal de Calderón, de su fracaso para poder derrotar a la delincuencia organizada, única responsable de prender la hoguera humana en el Casino Royale. Y ésta es la realidad monda y lironda: ni el gobierno estatal, ni el municipal tienen capacidad de fuego para pelear contra los cárteles bien armados y organizados. Y ésta es una verdad irrefutable: las fuerzas armadas no han podido derrotar al ejército irregular que integran muchas bandas con mejor armamento comprado en los Estados Unidos. Pero Calderón intenta embarrar a Medina y Larrazábal para él lavarse las manos y todos sabemos que Poncio Pilatos mandó directo a la cruz a Jesús El Cristo.

Los quesos
Aclaremos que el incendio fatal fue en el Casino Royale. Y súbitamente aparecen unos videos del señor Jonás Larrazábal, hermano del actual alcalde de Monterrey, recibiendo dinero en otro casino muy diferente, llamado “Red”. Por cierto clausurado. ¿Quién envió a las televisoras los videos? El dueño del “Red”, enojado porque su antro no está desplumando incautos e incautas. Si usted sale en un video recibiendo dinero de otra persona, ¿de qué lo pueden acusar? Si Jonás es el que sale en los videos, ¿por qué piden la renuncia de Fernando? Si usted, como Jonás, vende quesos o productos lácteos, ¿cuál es el delito? ¿Quiénes fueron los que propagaron la suma de 400 mil pesos? ¿Quién acusa a Jonás de “cobrar piso” a un Casino? ¿Sabe usted quién? Nadie. Todo el alboroto se armó en la prensa, radio y televisión por unos quesos que supuestamente vende don Jonás Larrazábal. ¿No le resulta extraño un escándalo nacional por unos quesos?

Cochinero
Los del PRI se dieron inmediatamente cuenta del “cochinero” armado por los mismos panistas. Sí, aunque usted no lo crea. La “Guerra de los quesos” fue organizada por panistas resentidos, porque Fernando Larrazábal y un grupo de amigos jóvenes del PAN les arrebataron el Comité Estatal del Partido Acción Nacional. Esa es la razón del escándalo organizado en donde andan metidos un ex gobernador panista, Fernando Canales; su hijo, y otros que por todos los medios han tratado de relacionar los videos de Jonás con el incendio del Royale. Como usted puede constatar, una cosa con otra nada tiene que ver. Jonás agarrando dinero en el Red por unos quesos; y en otro canal, 52 muertos en el Royale, porque el dueño no quiso pagar la cuota a un cártel muy peligroso y agresivo. ¿Tiene la culpa Fernando Larrazábal de tener un hermano que vende quesos? ¿Tiene la culpa de que la delincuencia organizada no puede ser frenada por el gobierno federal en Nuevo León? Nada. La neta, dicen los jóvenes: es un pleito de comadres panistas luchando por el botín político del 2012.

Candidaturas
Los viejos panistas tontos, obsoletos y corruptos de Nuevo León, tratan de “tumbar” al alcalde de Monterrey con unos videos donde le entregan dinero a su hermano. No procede. No es prueba de nada, sólo que Jonás vendía quesos y recibe su paga. Son videos mudos. Tomados a escondidas y de mala fe. Ni siquiera se justifica el arraigo de Jonás; pero bueno, el PRI y Medina también se quieren adornar, siendo que tienen una colota que les pisen, llamada José Natividad González Parás y familia que lo acompaña. Los viejos y mañosos panistas quieren recuperar el PAN estatal, para ser ellos los que designen los candidatos a las alcaldías, diputaciones, etcétera. Ese es el queso que los obsoletos quieren repartirse y para ello les estorba Fernando Larrazábal y sus aliados. Es un pleito político al que le están metiendo dinero para repartir entre los medios, incluidos los que presumen de rectos y honestos, y sin embargo tienen a sus hijos cobrando en nóminas gubernamentales. El PRI y otros partidos captaron el motivo del pleito y se replegaron.

Lodazal
Pero a medida que avanzan los días, el lodazal pestilente del PAN en Nuevo León ─aunque igual apesta en Tamaulipas con un señor Cabeza de Vaca, aliado de Josefina Vázquez Mota, dicen─ han salido a relucir “contribuciones” multimillonarias en dólares en todos los niveles del PAN. La revista Proceso del 11 de septiembre de 2011, aporta datos, pelos y señales de la inmensa corrupción que rodea a los casinos de Monterrey y de todo el país. Bajo el título de “El Zar del Juego, una Historia Siniestra”, destapa una alcantarilla que apesta a materia fecal y que entre otras cosas apunta que en 2006 no sólo el PAN de Calderón recibió millones de dólares de los “casineros”, sino que también el PRI y el PRD extendieron la mano para recibir dinero sucio. Y admírese usted, el que menos millones de dólares recibió fue el PAN. Nuestro espacio es pequeño para publicar párrafos de Proceso, pero estoy seguro que todavía la puede adquirir en los puntos de venta. Se va usted a quedar admirado del lodazal en que todos se revuelcan.

Cárteles
Reitero lo que dije hace días platicando con un grupo de excelentes amigos: los cárteles de la delincuencia organizada se quedan chiquitos frente a los cárteles políticos que operan en México. Unos escudados en los partidos políticos y otros al margen de ellos, en grupúsculos que no persiguen otro fin, más que enriquecerse de todas las formas posibles, saqueando las arcas públicas, los dineros del pueblo que ya no siente lo duro, sino lo tupido. Y lo peor: los cárteles de la delincuencia ya están operando aliados con los cárteles políticos. Por eso, Andrés Manuel López Obrador una y otra vez reitera que PAN y PRI son lo mismo y que no es posible que los mexicanos estén tan ciegos como para no ver una realidad tan evidente como lo es la ruina y la pobreza a la que han llevado al pueblo de México. La revoltura del PRIAN y la delincuencia ya es descarada y los electores debieran ir pensando muy bien a quién entregarán su voto el año entrante.

Estados Unidos
Demócratas y republicanos norteamericanos deben tener ya conocimiento que los millones de dólares que entregan al gobierno mexicano para supuestamente combatir a la delincuencia, es dinero que se esfuma en las manos de los políticos panistas y priistas. Es dinero tirado. Es dinero que debieran utilizar mejor para programas sociales en su propio territorio, que eviten que la cifra de adictos a toda clase de drogas siga creciendo. Porque honestamente, si piensan que el gobierno de Calderón va a terminar con los criminales en México, están rotundamente equivocados. Las fuerzas armadas tienen 5 años combatiendo en las calles y carreteras de todo el país, y pareciera que los grupos criminales toman cada día más fuerza y brotan por todos lados. El nivel de violencia al que se ha llegado es impresionante. Los únicos bien protegidos son los políticos que gastan millones en sus lujos y su seguridad. Los demás nos la pasamos corriendo como conejos asustados. Por eso, Washington debiera considerar no entregar más millones de dólares porque simplemente se esfumarán. Llevamos 50 mil mexicanos muertos. Se calculan 10 mil desaparecidos y 200 mil se han ido a Estados Unidos principalmente a Texas. El miedo los hizo salir del país con sus familias.

Insurgencia
Por eso no compartimos el punto de vista que expresan en Estados Unidos, de que en México hay insurgencia. Es decir, que hay un levantamiento popular. Esa opinión es equivocada, porque son los criminales los que están enfrentando a las fuerzas armadas. Lo que sí es cierto es que el pueblo de México está indignado con un gobierno panista que no da muestras de inteligencia. Y es que no la hay. Y no la habrá en los próximos meses, porque millones de dólares se canalizarán a las campañas políticas del PAN de Calderón para sentar a la fuerza y sea como sea, a Ernesto Cordero en la silla presidencial, garantizando la impunidad de los que han arruinado a México y lo han bañado de sangre. Estados Unidos debe saber que la inmensa mayoría de los ciudadanos no tenemos armas. No se nos permite tenerlas ni para nuestra defensa personal y familiar. Los que tienen las armas son las fuerzas federales y sus adversarios, los hombres de los cárteles. La ciudadanía esta indignada por tantas atrocidades cometidas desde el gobierno y por la delincuencia. Y es que son muchos los inocentes asesinados por uno y otro bando. No es pues, una insurgencia revolucionaria. Nadie quiere más sangre.

Conclusión
La “guerra de los quesos” que usted contempla en los medios, no es otra cosa que una embestida de los viejos y obsoletos panistas contra los neopanistas por el control del PAN en Nuevo León. Es auténtico canibalismo político alentado inclusive desde el Comité Ejecutivo Nacional contra el alcalde de Monterrey, quien no ha cometido ni le han probado ningún delito. Si Jonás ─el hermano incómodo─ cometió un delito, debe ser sancionado. Es inexplicable que el Comité Nacional del PAN, en lugar de “arropar” al alcalde de una ciudad tan importante como es Monterrey, se ponga a “exigirle” que deje el cargo ¿Por qué  y para qué? ¿De parte de quién y a favor de quién? ¿A quién le está tratando de hacer el trabajo sucio Gustavo Madero? ¿De veras van a expulsar a Fernando Larrazábal porque su hermano andaba cobrando la venta de unos quesos? ¿Por qué no le piden su renuncia a Calderón por los 50 mil muertos en México? Mi respeto absoluto a la bases militantes panistas, pero qué lástima que tengan esos “líderes” tan corruptos y hambrientos de poder y dinero.

trabago49@hotmail.com                 http://mx.groups.yahoo.com/group/elobservadorpolitico/

¿Desea dar su opinión?