|
DATOS BIOGRÁFICOS, DE RICARDO COVARRUBIAS
Eligio Coronado
A lo largo de la historia se ha venido produciendo entre Jalisco y Nuevo León un fenómeno poco común, debido a la distancia, y cuyas proporciones no han sido estudiadas aún: la migración de jaliscienses destacados a nuestro estado.
En un breve recuento podemos nombrar a tres gobernadores (Mariano Moret, José Eleuterio González y Bernardo Reyes), varios escritores (Luis Astey, Carlos Ortiz Gil y Agustín Basave, padre), algunos poetas (Sergio Cordero, Marisa García, Rogelio Flores de la Luz y José Eugenio Sánchez), dos periodistas (Pedro Reyes Velázquez y Salvador Martínez Cairo), dos músicos (José Hernández Gama y José C. Villaseñor), un filósofo (Agustín Basave Fernández del Valle), una pintora (Elizabeth Gartz), un historiador (Pedro de Alba, cofundador de nuestra UNL), dos arquitectos (Eduardo Padilla y Enrique de la Mora) y un hombre que brilló intensamente en las categorías de periodista, escritor, maestro, político, historiador, biógrafo y orador: don Ricardo Covarrubias (Lagos de Moreno, Jal., 1895-Ciudad de México, 1972).
Datos biográficos* constituye un homenaje que la UANL le brinda a este insigne personaje, el cual consta de ocho breves biografías y un artículo sobre la entrevista Juárez-Vidaurri, realizadas por don Ricardo, una semblanza del homenajeado (escrita por Roberto A. Naranjo), ocho testimonios (de Pedro Reyes Velázquez, José P. Saldaña, Humberto Buentello Chapa, Gerardo de León, Raúl Rangel Frías, Alfonso Reyes Aurrecoechea, Alfonso Rangel Guerra y Jorge Villegas), un prólogo (de Francisco Valdés Treviño) y su bibliografía.
Don Ricardo fue nuevoleonés por convicción. Aquí se desempeñó como maestro de historia en la UNL, diputado federal, subdirector del periódico El Norte por catorce años, director de la imprenta de gobierno, secretario de la Alianza Francesa, vicepresidente de la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística, director de las publicaciones La Voz de Zaragoza (1962), El Triunfo de la República (1967) y Año de Juárez (1972). Aquí nacieron todos sus hijos (incluyendo al también escritor Miguel, quien compiló este volumen) y aquí escribió todos sus libros.
Por cierto, una parte de su bibliografía refleja un indiscutible cariño por su estado adoptivo: Las calles de Monterrey (3 vols.: 1947, 1958 y 1970), Gobernantes de Nuevo León, 1582-1961 (1961, reeditado en 1979 y 1991), Anales de la vida del C. general de división Ignacio Zaragoza (1962) y Nuevoleoneses ilustres (1990).
Finalmente, su biblioteca personal, la misma que contribuyó a forjar al “hombre equilibrado cuyos sostenes consistían en una amplia cultura, en un sentido humano, y en la esencia de un espíritu limpio” (p. 116), se halla en la Capilla Alfonsina de la UANL, donada por él mismo.
Para compartir, enviar o imprimir este texto,pulse alguno de los siguientes iconos:
¿Desea dar su opinión?
|
|