Diputados de caricatura
Miguel Treviño Rábago 

Reynosa.- El “Jefe”, como se le conocía y reconocía a don José Espinosa Ruiz, fundador-director por más de 40 años del periódico vespertino El Tiempo en Ciudad Reynosa, Tamaulipas; era un hombre serio y sabio. A lo largo de 30 años más o menos, me dio la oportunidad de colaborar como reportero y columnista en las páginas de su diario. Allí aprendí mucho y a través de él conocí a don Guadalupe Díaz Jr., fundador-director de El Gráfico de Ciudad Victoria, quien también me abrió las páginas de su publicación para colaborar por muchos años con una columna que se llamaba "Telescopio". Nunca, ninguno, me censuró una columna, una línea, una palabra. Si acaso, corrigieron mi redacción y hasta mi ortografía, pero nada más. Vendían espacio publicitario, pero no criterio editorial. Eso era intocable, casi sagrado. Eran periodistas profesionales que honraban la amistad y el pensamiento de sus colaboradores.

Recordé al “Jefe” Espinosa y a “Lupe” Díaz, a quien considero el mejor columnista político que he conocido en Tamaulipas y que tenía por costumbre leerse todas las mejores columnas de los periódicos nacionales, porque accidentalmente, al encender el televisor por la mañana, y buscar cualquier canal que que no tuviera nota roja en la que se han especializado la mayoría, fui a dar al llamado Canal del Congreso. ¡Lotería!, estaban preparándose para recibir al Secretario de Hacienda quien comentaría y "respondería" las preguntas de los "Señores Legisladores", según lo decía engolando la voz Emilio Chuayfet Chemor, priista trepado en la presidencia de la Cámara de Diputados. La apertura de la sesión era vertigionosa, porque ya estaba "el invitado" esperando en el Salón de Protocolos.

“Este país -me decía el Jefe Espinosa- no tiene remedio, maestro”. Cuando me molestaba, protestaba, reclamaba y manifestaba mi absoluta inconformidad con los eventos políticos del momento, el "Jefe" me repetía  esa frase que nunca he olvidado porque ahora me la repito con más frecuencia, cada vez que veo el "cochinero" en que han convertido el país, primero los priistas a través de 70 años y en sólo 11 años, los panistas. Lo que vemos hoy, es lo mismo de siempre, pero los "albiazules" superaron ya con mucho a los tricolores en toda clase de marrullerías, saqueos, negocios, abusos, violaciones a la Constitución, leyes y reglamentos, tráfico de influencias, atropellos a la ciudadanía, asesinatos, desapariciones, pobreza, entrega de soberanía, traición a la Patria, etcétera. No han vendido el territorio, porque no han encontrado el modo, pero no tardan si se quedan en el poder en las elecciones del año entrante.

Amodorrado y todavía sin tomar un café (que es con lo que despierto realmente), escuché los nombres como de 20 diputados que deberían "acompañar" al Señor Secretario al Salón de Sesiones. ¿Para qué veinte, si con dos que le indiquen el camino a la tribuna, es suficiente?, me dije. Y allá viene el hombrecillo entre 20 fulanos y fulanas, repartiendo besos a las señoras, abrazos a los señores, cerrando de ojo a los cómplices, sonrisas fingidas, señas… Sólo que al verlo, recordé que el secretario de Hacienda ya no era Ernesto Cordero, sino otro de los amigos de Calderón de nombre raro. Y el gozo se vino al pozo. El Señor Cordero que es el "tapado" de Calderón para ser "destapado" como candidato a la Presidencia de México por el PAN, dejó la Secretaría y claro está, no se iba a exponer a una paliza por parte de los diputados, por su pobre actuación en Hacienda. El "nuevo" sería el encargado de torear a los 371 diputados de 500 que deberían estar presentes. Más de cien nunca se aparecieron a trabajar, que es para lo que el pueblo les paga.

México, estimados lectores y lectoras, efectivamente "no tiene remedio" como decía el "Jefe" Espinosa. Mientras que "Lupe" Díaz Jr. era un optimista que te emocionaba siempre adivinando las "jugadas" de la política estatal y nacional, el "Jefe" era más serio y realista. Excelentes amigos los dos, conocían -como en el beisbol- todas las señales del juego político. Permítame decirle que México está como está por la caricatura de diputados y Senadores que tenemos. La "comparecencia" del Señor Secretario fue una payasada más a la que se prestan estos "legisladores" que ganan miles y miles de pesos por estar representando una pantomima que para nada sirve al pueblo trabajador de México. El Señor Secretario reía, se burlaba, saludaba, mandaba besos y abrazos, ignoraba al orador en turno, hacía como escribía y movía papeles, pero la triste realidad es que estaba allí para no decir nada ni hacer caso de nadie. Una descarada burla.

Cuando las cámaras de televisión enfocaban las tribunas o las curules de los diputados, muchos de ellos platicaban, reían, se daban abrazos, tal vez se contaban chistes, comían cacahuates, tomaban coca cola en bote. etc. Supuestamente cada partido político debía posicionarse en relación al Presupuesto del 2012, pero la tribuna fue utilizada para agredirse políticamente entre PAN y PRI. Se acusaron de todo. Recordaron el pasado autoritario del PRI, hasta llegar al presente antidemocrático y represivo del actual PAN. Reclamaron los recortes a la educación, al campo, a las carreteras, a los Gobernadores del PRI, etc. Hasta los famosos "ninis" (jóvenes que ni estudian ni trabajan) salieron como futuros integrantes de la delincuencia organizada por falta de empleo o de lugares en las Universidades donde por miles ya fueron rechazados. El Señor Secretario se reía, se tapaba la boca, tomaba agua, miraba a las tribunas y saludaba, etc. Tiros verbales al aire o a la nada del PRD y del resto de los partiditos. Preguntas absurdas, contestaciones vagas. Desgano por no decir valemadrismo total.

Diputados y senadores, con raras excepciones, no sirven para nada. Un circo bien organizado, para tapar la boca de los que reclaman acciones fuertes por el bien de México. ¿Nombres de los grandes evasores del pago de impuestos? ¿Nombre de los empresarios beneficiarios de los favores presidenciales? ¿Cuántos millones más recortará Calderón a las escuelas superiores? ¿Cuántos millones se arrebata a los hombres del campo? ¿Cuántos millones más para las fuerzas armadas que han exterminado a más de 50 mil "malos" mexicanos?, dicen ellos. ¿Cuántos millones de dólares ya se fueron a los bancos extranjeros por temor a otra crisis económica? ¿Cuántos miles de familias ya huyeron del país por la violencia diaria en todo el territorio nacional? ¿Cuántos millones de dólares se gastarán PRI y PAN en la próxima campaña presidencial del año entrante? Preguntas sin respuesta porque a nadie le interesa darle explicaciones a 110 millones de mexicanos. Las mafias del poder ignoran al pueblo, y los diputados y senadores también.

Atole con el dedo es precisamente lo que nos siguen dando. Y a ello contribuyen también muchos medios de información, que aún cuando saben que a los Tres Poderes "les vale" la situación del país, ellos "informan" lo que les ordenan  para luego pasar la factura en las tesorerías. Triste espectáculo de tipos y señoras que se dicen "representantes" populares, pero que en realidad no representan más que a ellos mismos y sus grupitos de vividores del presupuesto nacional. Todo con cargo a usted y a mí, que pagamos impuestos o somos sancionados por incumplidos y morosos. Las dos Cámaras son estructuras burocráticas llenas de parásitos que viven del pueblo trabajador y que no son más que un adorno de Congreso incapaz de frenar los excesos de los Presidentes, que los ven más como empleados, que como legisladores y defensores de los intereses populares. Y todavía así, buscan reelegirse porque no han llenado de enriquecerse.

Viendo el desorden, la falta de seriedad, la mediocridad de diputados que ni siquiera saben leer, la sumisión de los aliados panistas de Calderón, la actitud prepotente del Señor Secretario que nunca dejó de reír y saludar, las "porras" de diputados y diputadas gritándose insultos, ignorando a los oradores que no eran de sus partidos, los empleados de la Cámara repartiendo en charolas botanas y refrescos, no pude más que recordar la palabras del "Jefe" Espinosa: "Este país no tiene remedio, profesor". Lo peor es que poco a poco compruebo que la política en México la han envilecido priistas, panistas, perredistas, etcétera. Los partidos políticos son hoy botín de piratas que simulan pelear por México, pero luchan en lo oscurito porque nada cambie. Quisiera haberles dicho a esos "legisladores" todas las majaderías que Javier Sicilia pronunció el otro día, harto de tantas agresiones y burlas. Y sin embargo puedo escribirles el título del su libro Estamos hasta la madre de ustedes señores y señoras diputados y senadores de caricatura.

Frecuentemente, amables lectores, me formulan la pregunta de qué hacer. Y confieso que como un simple observador y "escribidor" de asuntos políticos, no sé ni qué contestarles. Somos tan desunidos los mexicanos, que de eso se aprovechan los tres poderes, el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial para cometer toda clase de tropelías y gozar de la impunidad absoluta. Nadie controla a nadie. Leo cómo Barak Obama no puede convencer a los legisladores republicanos de sus planes y comparo cómo Calderón aquí hace y deshace sin tomar en cuenta al Congreso con más de 600 "representantes" del pueblo. Desató una guerra que nos ha costado más de 50 mil muertos y los Diputados y Senadores parecen estar mudos, sordos y ciegos ante esa masacre de Estado. ¿Alguien ha planteado enjuiciar a Felipe Calderón por genocidio? Díaz Ordaz es una caricatura de represor frente al actual encargado del Ejecutivo. Y el baño de sangre continuará un año más....

Si viendo y viviendo esta tragedia nacional iniciada por el PRI y acelerada por el PAN no razonamos nuestro voto el año entrante, no sería remoto que terminemos enfrascados en una guerra civil para reordenar la República y organizar un nuevo gobierno. Con el peligro latente de que en unas horas, los vecinos norteamericanos se nos metan hasta la cocina con el magnífico pretexto de proteger "su seguridad nacional". Nada les encantaría más que invadir y anexarse todo el territorio nacional para convertirnos en una estrellita más en su bandera. Todos deberíamos movernos ya fuera de los partidos políticos actuando en las organizaciones civiles. Los diferentes líderes con arrastre popular deben unificarse haciendo a un lado su egocentrismo y conjuntar fuerzas para el 2012. Es la hora de la verdad. Y estoy de acuerdo, ni PRI ni PAN le sirven al país, pero, ¿quién puede tener la estatura de un Hidalgo, un Juárez o un Madero para transformar a México en un país donde impere la Constitución y el orden social antes de que estalle una Revolución como ya sucede en otras partes del mundo?

Recomiendo de lectura los dos últimos números de la revista Proceso, en relación al Zar de los Casinos en México y sus contribuciones millonarias a políticos de todos los partidos y el libro Justicia Inútil, de Jorge Fernández Menéndez y Bibiana Belsasso. Editorial Taurus. Muestran la impunidad, la corrupción y los desaciertos de policías, ministerios públicos y jueces en México. Los casos más sonados de una justicia que sirve sólo a intereses particulares.

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