La Sierra de la Silla es un pulmón de cientos de miles de encinos viejos que nos ayudan a respirar, y a juntar agua. No permitamos que la aniquilen
Cuando se modifica la orografía con un trazo carretero, por ejemplo, y se destruyen capas vegetales, eso tiene consecuencias, la primera es que se deja de captar agua, y se desencadena una serie de modificaciones al ecosistema, por lo tanto, empezará a dejar de fluir cada vez menos agua y eso conllevará a que se muera mucha vegetación y se dejen de proveer los servicios ambientales básicos y esenciales para la vida que brinda nuestra Sierra de la Silla, y de los cuales dependemos todos nosotros como habitantes de esta ciudad y las generaciones futuras.
Atravesar con un túnel la Sierra de la Silla, definitivamente modificará el equilibrio en los ciclos hídricos que mantienen íntegro el bosque de encinos que ahí habita, por más que se diga que será una carretera ecológica, eso es simplemente una vil falacia, cuando perforen la Sierra el agua dejará de escurrir, las nubes ya no se conglomerarán, se dejará de captar el agua por la brisa que ahí se concentran por atracción de la misma vegetación y escurrimientos, las lluvia será cada vez menos y la muerte de la vegetación por falta de agua y exceso de calor se extienda y convierta a la Sierra de la Silla en un lugar árido sin esos viejos arboles, donde una vez hubo un pulmón de cientos de miles de grandes encinos que nos ayudaban a respirar, y nos ayudaban a juntar agua.