ANÁLISIS A FONDO
¿Se cuartea la izquierda?
Francisco Gómez Maza
¿Dejan sólo a López Obrador?
“Post” cifrado del senador Navarrete
Ciudad de México.- Cuando Andrés Manuel López Obrador redobla su lucha “por la democracia” y con sus “Diez Fundamentos Básicos” -bastante endebles, por cierto- presiona al Tribunal Electoral para que invalide la elección presidencial, comienzan a aparecer signos de quebrantamiento en las filas del Movimiento Progresista, a menos de un mes de que los magistrados den a conocer su veredicto.
Confidentes cercanos al PRD informaron que el hartazgo ha comenzado a permear en un grupo importante de dirigentes, e inclusive se estaría gestando una desbandada hacia los establos de Enrique Peña Nieto.
El coordinador de la bancada perredista en el senado de la república, Carlos Navarrete, acaba de trasparentar las cuarteaduras. Este martes lo hizo en Chilpancingo, cuando declaró al periodismo que el PRD acatará el fallo del Tribunal Electoral, a conocerse a más tardar el 6 de septiembre, sobre los comicios presidenciales, “aunque no lo compartamos”. Y esta actitud dista mucho del radicalismo del tabasqueño y sus huestes.
Es más, el guanajuatense pareció mandar un mensaje entrelineado, muy claro, al propio Andrés Manuel, quien ha dicho defender en esta ocasión los cauces institucionales. “Todos los que decimos respetar la legalidad y luchar por la vía de la legalidad –afirmó Navarrete- tendremos que llegar a una conclusión: pase lo que pase con la calificación presidencial del 6 de septiembre; unos y otros deberemos aceptar el veredicto del Tribunal, aunque no lo compartamos”.
Claro que Navarrete atempera: “Nosotros quisiéramos que el Tribunal valorara con plenitud todas las pruebas. Pero quiero decir una cosa: una vez que resuelva tendremos que acatar el resultado, evidentemente… Podrá mantenerse la impugnación política, pero desde el punto de vista legal todo termina con la resolución del Tribunal”.
Pero dispara a la yugular lopezobradorista: “la historia reciente enseñó a la izquierda que hay errores que no deben cometerse nuevamente, y que lo más conveniente es mantenerse dentro del marco legal… Hay una realidad muy diferente a la de 2006, por lo que son otras las acciones que se deben impulsar. Sería un error plantear acciones radicales como las que se tomaron en aquel año para echar abajo la elección”. Más claro no canta un Chucho. Y como el señor Navarrete es compadre de Los Chuchos, pues podría pensarse que habló en Chilpancingo a nombre del presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano.
No es de extrañar la declaración del senador Navarrete Ruiz. Es uno de los de casa que se ha confrontado con López Obrador desde antes del proceso electoral, y por lo menos es simpatizante de los enemigos políticos del tabasqueño, “Los Chuchos”, grupo del cual es una de las cabezas el presidente del CEN del partido, Jesús Zambrano.
Vamos a esperar más noticias, y confirmadas, porque eso de que se gesta una desbandada hacia el PRI es, por el momento, sólo una confidencia de café, aunque cuando el río suena es porque trae agua. López Obrador sabe ciertamente que su lucha por la invalidación de la elección se topará con el academicismo legalista de los siete magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Pero para que no digan, como me dijo ayer mi comadre, que “ha perdido todo, hasta la cordura”, entregó ayer al TEPJF su decálogo que “resume las distintas irregularidades que el PRI y su candidato Enrique Peña Nieto realizaron en la pasada elección presidencial.”
Como dice el dicho, quiere enseñarle a curtir chiles a Clemente Jacques, pues explicó a periodistas: “El propósito de este escrito es que los magistrados vayan centrando el tema de la invalidez de la elección presidencial.”
En medio de este jaleo, echaron su tarraya al agua, a ver qué pescan, las empresas más poderosas del espectro bursátil, las casas de bolsa, las operadoras de sociedades de inversión, y el propio el Grupo Bolsa Mexicana de Valores, publicando un desplegado para rechazar lo que ellas consideran acciones de polarización social, “las cuales alteran el orden constitucional y la imagen del país, y reprobaron los actos de violencia contra las tiendas de autoservicio Soriana.
A desfondo
Y hasta que lo consideró oportuno, el señor Calderón firmó el decreto de la reforma política, ante todos los partidos políticos, menos los que integran el Movimiento Progresista, no obstante de que diputados y senadores de la izquierda votaron el pasado 18 de julio las reformas constitucionales. Una reforma coja porque no toca temas que podrían hacer más liviana la carga de la democracia representativa, como la segunda vuelta en la elección presidencial, la reducción del número de integrantes del Congreso y el porcentaje de votos para que un partido mantenga el registro.
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