 Argelia Frías Tapia
afrias11@hotmail.com
100219 Décima
Es del dominio público que el sector académico oficial, al igual que en otros lugares del ejercicio profesional en el sector público, los trabajadores de estos sectores son bastante mal remunerados, lo que obliga a muchos de los que estamos en estos rubros a buscar otras opciones de ingreso, con lo cual evidentemente el desgaste y la calidad del servicio educativo se ve mermado, lamentablemente debo agregar. Las notas que he han salido en prensa "informando" de tal polichambismo que se presenta en los niveles administrativos y de jefaturas en diferentes áreas, deja al descubierto la desigualdad salarial de quienes formamos parte de ejército de trabajadores que enfrentamos en el día a día, la responsabilidad de la formación de las generaciones futuras. Tales salarios, solo corresponden a una minoría que ha sabido moverse en el plano de lo mal llamado "política", es decir en el juego del poder, y con honrosas excepciones gente muy preparada en el ámbito profesión al, quienes tiene acceso a este tienen el privilegio de poder trabajar para lo que mas nos debería ocupar que son nuestros jóvenes. Pero lamentablemente al llegar a ocupar puestos de jerarquía, es de todos sabido, se privilegian a aquellos que están al alado de quienes ocupan puestos de responsabilidad de niveles medios y superiores.
El resto, (entre el 70 y 80% de los trabajadores) enfrenta en el día a día la responsabilidad de hacer un trabajo lo mejor posible profesionalmente hablando, con salarios de miseria que no cubren dignamente las más mínimas necesidades de el trabajador mismo, mucho menos de sus familias.
Esto es algo que debería resolverse, para que los presupuestos otorgados fueron distribuidos más equitativamente y realmente reflejasen una mejor calidad y condiciones de trabajo para quienes enfrentamos en el día a día el reto de brindar un servicio educativo de calidad.
Es una "locura" que haya prebendas tales que haya dentro de los sistemas quienes tienen tres o cuatro salarios que no devengan y quienes son maestros por horas que tienen mas de 20 o 30 horas frente a grupo y que ganan la miseria de 4,000 o 5,000 pesos al mes y sin condiciones de trabajo adecuadas para tal trabajo, agregando que no les pagan el inicio de cada semestre si no inicia justo en quincena, y que además tienen contratos por obra determinada. En fin que en el sector publico habrá que poner orden, si queremos que las generaciones venideras reciban una formación acorde a las necesidades de la cambiante y demandante realidad social que les tocara enfrentar y que determinarán el futuro de nuestro país en mucho.
Estas reflexiones son a título personal.
Atte.
Argelia Frías Tapia
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