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Pan y circo con la tarjeta feria
Armando de León M.

Mi pronóstico histórico con respecto a la tarjeta que te roba la feria -como la definió Luis Valdez- es que ésta será cancelada. El anuncio lo hará el gobernador con bombo y platillo, como si fuese una conquista del pueblo, pensando él en las necesidades del pueblo, aunque la realidad de las cosas es que esta acción no significará la disminución de las tarifas del transporte público (¡ojo!).

No es de extrañar que esta clase de problemas primero se fabriquen desde las altas esferas gubernamentales para generar un estado de enojo e infelicidad entre la población, con el fin de que luego, “resolviéndolos”, se ganen simpatías por la persona del gobernante y del partido en turno.

La medida no es más que clientelar y tiene por objeto la distracción de problemas de fondo que nadie –ningún gobernador– podrá resolver, como son el asunto de la guerra del narco y del empobrecimiento del país, entre otros de gran envergadura. Se trata de pan y circo. Aunque más circo que pan en esta ocasión.

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