ANÁLISIS A FONDO
Manita de puerco a López Obrador
Francisco Gómez Maza
Con los empresarios, todo
Sin los empresarios, nada
iudad de México.- Andrés Manuel López Obrador, candidato de las llamadas izquierdas a la presidencia de la república de México (¿de veras son izquierdas, o navegan con la bandera de la izquierda para ganar votos?), por lo visto no se siente seguro con los trabajadores y los desposeídos, y busca el apoyo de los empresarios, cuando históricamente empresarios y trabajadores son como el agua y el aceite.
Su nueva táctica electoral quedó de manifiesto claramente en la conferencia de prensa ofrecida en Guadalajara, el 14 de diciembre: sin los empresarios, el izquierdista no va. Aprendió de Luiz Inácio Lula da Silva, el sambero ex presidente de Brasil, que navegó con la bandera de los trabajadores, pero de la mano de los empresarios y del Fondo Monetario Internacional, el brazo “armado” de la Casa Blanca.
Revelador el comienzo de su encuentro con los periodistas en La Perla Tapatía. Puros empresarios arropándolo. Ningún trabajador. Menos alguien del sector de los desposeídos: “Estamos a las órdenes de ustedes. Ya conocen a quienes me acompañan: Fernando Turner, Juan Mario, Fernando, es empresario de Nuevo León; Juan Mario, empresario joven de Jalisco; Tomás, empresario de Jalisco, y Alfonso Romo, empresario también de Nuevo León y del país.”
Hasta la victoria con los empresarios, parece habérsele escuchado al “izquierdista” que busca por segunda ocasión el poder que da la presidencia de México. ¿De veras busca la justicia en las relaciones de producción?
En Guadalajara, López Obrador no hizo la diferencia con el señor Calderón, a quien siempre ha considerado presidente espurio, ni con cualquiera de los tres panistas que pelean por la candidatura de la derecha, ni con el priista Enrique Peña Nieto. Todos, a la cargada con los empresarios…
López Obrador se reunió con empresarios jaliscienses, a quienes informó que, estando él de presidente, “va a haber equilibrios macroeconómicos… y al mismo tiempo va a impulsar el crecimiento del país… “vamos a crecer a tasas del 6 por ciento anual para poder generar un millón 200 mil empleos al año (guauuuuu), que son los que se necesitan… sacar a México del estancamiento económico y crear empleos… y ellos están de acuerdo con eso.”
“Estamos hablando no sólo del planteamiento general, sino ya (de) los cómos; o sea, estamos aterrizando nuestra propuesta. Antes de las elecciones se va a presentar ya el proyecto específico y se van a suscribir compromisos, y se va a conocer bien cómo vamos a sacar a México adelante; cómo vamos a reactivar la economía, a crear empleos y a que haya bienestar.”
“Y algo que les preocupa a todos los ciudadanos, y en particular a los empresarios: cómo serenar al país, cómo enfrentar el flagelo de la violencia y estamos haciendo una propuesta en ese sentido.”
Por lo visto, López Obrador ya no quiere que se le califique de izquierdista, de aliado de los trabajadores. En la conferencia de prensa de marras dijo: “Estamos informando a empresarios sobre nuestra propuesta; algo que no se pudo hacer en el 2006 y ahora estamos llevando al cabo, informando sobre lo que realmente somos, lo que representamos y lo que proponemos, y nos ha ido muy bien; hemos tenido reuniones en Monterrey, en Torreón, en Yucatán y ahora aquí, en Jalisco; estamos terminando todo lo que significó el día de hoy de pláticas, de encuentros con el sector empresarial de Jalisco y nos fue muy bien. Ese es el balance.”
AMLO está feliz de que algunos estén participando con él, “convencidos de que hace falta un cambio y que todos debemos de participar y… en otros casos, pues ayuda mucho el que se dé una información de primera mano, el que no se distorsionen las cosas para que se tengan todos los elementos y que, de manera libre, los ciudadanos, en este caso los empresarios, puedan decidir, elegir…”
Recordó López Obrador que en el 2006 “no fue posible eso y por eso se llevó al cabo esta guerra sucia; toda esta campaña para infundir miedo, con muchas mentiras, el que íbamos a expropiar bienes, que iba a ser un gobierno como el de Chávez, que al que tuviese dos propiedades le íbamos a quitar una; en fin, una serie de mentiras. Entonces ahora tenemos la posibilidad de informar y esto va a ayudar mucho.”
Es decir, López Obrador busca la presidencia de la república, emulando a Lula da Silva, el ex dirigente obrero que sufrió hasta la cárcel, pero que se cogió de la mano de los ricos. Nada de justicia para los trabajadores, que por millones votaron por él en 2006 y siguen creyendo que él será su salvación frente al fallido Calderón y frente al representante del pasado vergonzante, Enrique Peña Nieto.
¿No les digo? Todos son coyotes de la misma loma.
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