ODA A UNA HIJA
Niña mía:
hoy comprobaste que hay un ángel que te cuida,
la vida es un milagro,
y conviene aprovecharla, aprehenderla,
te estoy preparando para hacerlo
quizá ahora que hablamos de la vida y de la muerte
comprendas mejor por qué lo hago.
La misión de otro ser ya se cumplió
la tuya y la mía tienen todavía tareas pendientes,
ten fe, confianza, paciencia.
Encuentra tu centro, tu soporte, tu conciencia, tu sentido personal,
lucha, cree, sueña, diviértete, descubre tus potencialidades
consigue tus anhelos, tus metas y aprovecha oportunidades.
Los principios y valores inculcados son tus raíces
haz que soporten un árbol frondoso que dé frutos:
tu razón de vivir, decisiones acertadas,
hay detrás un ejemplo de fortaleza y valentía,
un poderoso espíritu que guía tus pasos.
La vida no se equivoca, éste es tu mejor momento,
sigue la trayectoria, desde una plataforma de amor;
amor personal, a los tuyos, a Dios, a la naturaleza.
Cuídate, valórate, atrévete,
los tiempos no retroceden, son periodos para
lograr lo que queremos,
sé sabia, tolerante, empática,
tu raciocino, tu fe, tu corazón y tu presencia te sostienen,
eres un ser especial, único, incomparable,
con una gran fortaleza para enfrentar obstáculos,
no tengas miedo; avanza, conquista, florece, trasciende…
Sabes que cuentas conmigo para todo
porque el amor de una madre es infinito.
Ruth Cordero Bencomo
ruthcordero1@yahoo.com
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