HABÍA UNA VEZ
Candidato al calabozo
Everardo Hernández Medrano
Matamoros, Tamaulipas. El PRI presentó una queja ante el IFE contra el presidente Felipe Calderón por sus declaraciones al diario The New York Times en la que sugirió que algunos priistas buscar pactar con el narcotráfico, y lo acusó de afectar la equidad e imparcialidad de la contienda electoral.
La queja, entregada a la Secretaría Ejecutiva del órgano electoral, responsabiliza al titular del Ejecutivo de reincidencia al afirmar que previamente el mandatario fue señalado por el órgano electoral por sus mensajes de promoción durante la campaña en el Estado de México.
En la queja de 74 fojas firmada por el representante del tricolor ante el IFE, Sebastián Lerdo de Tejada, acusa de violación a los artículos 41, 108, 109 y 134 de la Constitución.
Los dichos del titular del Ejecutivo, de acuerdo con el PRI, además benefician a los aspirantes del PAN a la Presidencia.
“Las declaraciones del presidente les constituyen un beneficio ante la ciudadanía al exponer temas y proyectar una forma de gobierno determinado hace que los aspirantes que en cuanto inicien las contiendas en lo interno del partido serán precandidatos y de forma anticipada se les está colocando ante la preferencia ciudadana, es por ello que el beneficio existe y debe ser contabilizado para efecto de sumar a las precampañas de cada uno de los actuales aspirantes”, precisa el documento.
El documento, recuerda la entrevista que el presidente Calderón concedió el 15 de octubre al periódico estadunidense, en la cual, “efectuó declaraciones a favor de su gobierno, específicamente sobre las acciones que ha realizado en materia de seguridad y economía”.
La denuncia acusa que las declaraciones de Calderón tiene el objetivo de “generar una opinión adversa” contra el PRI y asegura que sus dichos violan la Constitución y el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.
El Presidente terminó de leer la columna HABÍA UNA VEZ se sirvió otro vaso de ron y recriminó a sus asesores.
-Ya ven, por tardarnos en mandar a la cárcel al dirigente nacional del PRI Humberto Moreira, ahora el acusado soy yo y gimió inconsolable “Madre mía de Guadalupe, por tu religión me van a encerrar”.
En la enorme pantalla del televisor presidencial apareció el rostro inolvidable del ex presidente Vicente Fox amonestando a su sucesor
-Es indudable que el Presidente emitió una declaración muy imprudente en contra del PRI porque además de ser el presidente es el jefe de estado y actuó como jefe del PAN y sus acusaciones sin fundamento ante un medio de comunicación internacional tienen un impacto negativo no solo contra el PRI sino también contra el país…
-¿Por qué afirma que tiene un impacto negativo en el país? Pregunta el entrevistador al ex mandatario.
-Bueno- Se atusa sus enormes bigotes- Pues porque un jefe de estado está obligado a probar sus dichos y presentar las denuncias ante las instancias de justicia en lugar de andar diciendo ligerezas en los medios de comunicación.
-¡Miren! Gimió otra vez el Presidente- ¡El burro hablando de orejas!
-No está hablando de Carlos Salinas- Corrigió uno de los avispados asesores presidenciales- Creo que está hablando de Usted…
En eso estaban cuando en la pantalla apareció el secretario de Gobernación, Francisco Blake, para aclarar por tercera vez que los comentarios del presidente Felipe Calderón en torno al PRI y el tema de la seguridad son parte de un debate en curso y rechazó categóricamente que con ello el gobierno violente la ley electoral o participe de una guerra sucia.
“Yo no veo en donde esté lo sucio y dónde esté la guerra. Lo que tenemos que hacer es construir, en el diálogo, la unidad para sacar los acuerdos que requiere el país”, señaló en breve entrevista.
-Señor secretario Blake- Interrumpió su bisoño asistente- póngase los anteojos para que pueda ver lo sucio y la guerra contra el PRI.
-¡Virgen Santísimo! Exclamó un televidente- Esta peor que su jefe, por eso estamos como estamos. ¿Debate en curso? ¿Cuál debate? ¿Así como se han portado con la ciudadanía, con el pueblo mexicano, con Sicilia? ¿Dónde está la guerra, en todo el territorio mexicano, Blake? ¿Dónde está lo sucio? En los Pinos y Gobernación, Blake.
Mientras tanto, en conocido restaurante de la Ciudad de México, el líder priista Humberto Moreira se atacaba de risa, mientras festejaba y brindaba con su hada madrina Elba Esther Gordillo.
-A ver si después de esto me vuelven a acusar de falsificar decretos oficiales para obtener créditos bancarios de manera ilegal- bravuconeó el dirigente priista, mientras Elba Esther lo miraba anonadada y satisfecha de los logros de su alumno más destacado.
En otra trinchera, el senador Manlio Fabio Beltrones (PRI) señaló en torno a las recientes declaraciones del presidente Felipe Calderón en que “no debemos perder el tiempo en fuegos de artificio ni en discusiones sin sentido”.
Luego de que varios panistas defendieron caninamente el derecho del presidente Calderón para expresarse en torno a la lucha contra el narcotráfico y las posiciones que han tomado en el PRI.
Al preguntarle si las expresiones del mandatario tienen intereses electorales, Beltrones dijo desconocer si ello es así “aunque a muchos les parezca”. Este espacio de confusión de los últimos días debe de clarificar el espacio de cada quien: el presidente, gobernar y presentar resultados, mientras que los partidos deben organizar bien sus procesos internos.
El senador Beltrones confió en que en 2012 no se repita el escenario de 2006, cuando los magistrados electorales concluyeron que el entonces presidente Vicente Fox puso en riesgo la elección y le restó legitimidad a los precarios resultados electorales.
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